La Escuela Politécnica de Ingeniería (EPI) de Gijón acogió a mediodía de ayer la presentación de los trabajos realizados por cuatro alumnos mexicanos participantes en el programa de movilidad Delfín, impulsado por el gobierno del país americano. Con este acto se puso fin a una estancia académica de dos meses en Gijón. El taller de Energías Renovables de la EPI, coordinado por Manuel Rico Secades y Antonio Javier Calleja Rodríguez, fue el que recibió a los jóvenes mexicanos. De hecho es la tercera colaboración del taller con el citado programa.
En el 2012, cuatro fueron los estudiantes mexicanos participantes, mientras que en el 2013 fueron sólo dos. El número de interesados se ha ido incrementando edición a edición, desde las seis solicitudes del primer año hasta las más de sesenta de este. La EPI se ha visto obligada a rechazar un elevado número de peticiones por la falta de alojamiento disponible. "No tenemos capacidad para acomodar a tantas personas durante el verano. Buscar familias por nuestros propios medios es bastante complicado y supera la capacidad de nuestro grupo de trabajo", lamentó Manuel Rico Secades.
Los estudiantes de intercambio se integraron en un equipo formado por alumnos de la escuela gijonesa. Según Manuel Rico Secades, "la experiencia resulta muy positiva para ambas partes".
La investigación llevada a cabo por los estudiantes se centra en la mejora de la eficiencia energética en ciudades inteligentes, tratando el tema desde el punto de vista de la iluminación y la integración del mobiliario urbano y la adaptación de éste al entorno.
Los alumnos venidos desde México son César Alejandro Chávez Cerna, Hugo Eduardo Vega Ayala, Marco Tulio González Montoya y Jorge Arturo Quintero Navarro, todos estudiantes de los últimos cursos de Ingeniería Electrónica en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo con un brillante expediente académico. Sobre su estancia en Gijón, valoraron muy positivamente lo que han aprendido porque "son temas nuevos que no se trabajan mucho en nuestra universidad", contaban ayer. Aunque los cuatro jóvenes regresarán en los próximos días a su país, no descartan volver a Gijón en el futuro: "nos hemos informado de los másteres que ofrece la Escuela Politécnica durante la estancia", comentó González Montoya, a lo que añadió que en su caso le había parecido "especialmente interesante" el de electrónica de potencia.
