El Consejo Social de Gijón ha aprobado este miércoles una Declaración Institucional que será llevada al Pleno de este viernes, en la que instan a los responsables de todos los ámbitos, tanto públicos como privados, para que adopten las medidas necesarias que aseguren la continuidad de la línea marítima Gijón-Nantes/Saint Nazaire, junto los enlaces con Poole (Reino Unido) y Rosslare (República de Irlanda) a partir del mes de octubre.

De esta forma, buscan no solo la continuidad de la línea sino también el que esta sirva para consolidar Gijón y Asturias como punto de referencia estratégico en el transporte marítimo intermodal dentro del mapa logístico nacional y europeo.

Asimismo, en la Declaración, se destaca la importancia de esta autopista marítima y su contribución a la mejora de la competitividad de las industrias y empresas, así como que, desde su implantación, esta iniciativa se ha convertido en elemento fundamental para el posicionamiento internacional del Puerto de Gijón como referente del transporte intermodal.

A este respecto, se señala que desde septiembre de 2010 cuenta con una media de 120 camiones y 200 pasajeros por trayecto, lo que ha permitido que ya en su primer año de existencia que alcancen Gijón y Asturias más de 25.700 vehículos y 43.000 pasajeros. También se hace referencia al "éxito" de la línea y a una importante demanda por parte de usuarios de diferente índole, nacional e internacional.

Al margen de los beneficios generales, como pueda ser un transporte más sostenible y una menor emisión de CO2, se remarca especialmente que tanto para Gijón como para Asturias permite mejorar las comunicaciones existentes haciendo a las empresas del territorio más competitivas, así como su atractivo como espacio de ubicación empresarial.

También se destaca la potencialidad que supone para el Puerto de El Musel, con una oferta diferenciada, la aparición de nuevas actividades y empresas vinculadas al propio transporte marítimo y la logística en general y el incremento del número de visitantes y mejora de la actividad turística.

Unas ventajas y prioridades de las que el Consejo Social alerta de que no se disfrutarán en caso de que, tal como anunció la naviera, en otoño deje de prestar el servicio. Además, condiciona la viabilidad de otras infraestructuras que se nutren directamente de la actividad del transporte y la logística, como pueda ser El Musel o la Zona de Actividades Logísticas e Industriales de Asturias (Zalia).

En la Declaración Institucional, asimismo, se alude a la puesta en marcha de otras líneas marítimas con objetivos similares, desde puntos próximos, como es Vigo, "pudiendo provocar un efecto rotación donde las empresas concesionarias dejen de prestar el servicio en función de la existencia de determinadas ayudas públicas, lo que daría lugar a un espacio de incertidumbre que afecta directamente a las estrategia y competitividad de las empresas".