Antonio Monje es profesor de Matemáticas de Secundaria desde 2004. Comenzó en el uso de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) en el IES Tamujal de Arroyo de San Serván, Badajoz, creando la plataforma Moodle "Enseñanza Virtual de Extremadura, EVEX" que aglutina fundamentalmente a profesorado extremeño. Ha sido coordinador TIC en el periodo 2005-10. Desde septiembre de 2010 es el Director del Centro Nacional de Desarrollo Curricular en Sistemas No Propietarios (CeDeC), un organismo dependiente del Ministerio de Educación a través del Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y Formación del Profesorado (INTEF) y de la Consejería de Educación y Cultura del Gobierno de Extremadura. Además, es coautor de los recursos "Redes sociales para familias" y "Guía para la creación de materiales educativos" entre otros. Ayer impartió una ponencia sobre "Recursos educativos abiertos: creatividad e innovación" en el marco del I Congreso de innovación educativa que se celebra en el colegio de la Inmaculada.
-¿Cómo se puede ser creativo en el aula?
-Lo que está claro es que la educación necesita un cambio y ese cambio tiene que venir de la mano de la metodología. Las Tecnologías de la Información y la Comunicación tienen que ser una herramienta que apoye ese cambio metodológico pero que no como un fin en sí mismo. No obstante, hay que romper ese concepto utópico de que con el uso de las TIC vamos a cambiar las relaciones profesor-alumno y que los alumnos van a aprender mejor por sí solos. El aprendizaje son procesos en los cuales el alumno tiene que esforzarse y el docente le plantea unos retos. Nosotros lo que planteamos es que las TIC sirvan de ayuda en ese proceso de cambio.
-¿Esas tecnologías sirven más como apoyo para el docente o para el alumno?
-Yo creo que tienen que servir para los dos. El docente puede lanzar sus propuestas a través de las TIC o mediante elementos escritos sin más, pero lo que tiene que buscar es que el alumno utilice las TIC cuando realmente le aportan un valor. Mi misión no es enseñarles a manejar la herramienta pero sí que les voy apoyar para que en grupo, o individualmente, lleguen a la conclusión de que esa forma de presentar el trabajo les va a aportar un valor añadido. Las clases de ahora necesitan de mucha atención personalizada frente a los modelos rígidos de papel donde no se pueden hacer esas adaptaciones. En ese sentido al docente le aligera el trabajo, además de ayudarle en el control del aula.
-¿Las nuevas generaciones de nativos digitales llegan más predispuestas a ese modelo basado en apoyos tecnológicos?
-Ellos están ya inmersos en ese mundo. Frente a lo que ocurría con los docentes, donde teníamos un grupo de compañeros a los que en principio había que enseñarles dónde estaba el botón de encendido de un ordenador, con las generaciones actuales de alumnos eso ya se ha conseguido. Todo ese aprendizaje los chicos ya lo tienen porque lo han vivido desde pequeños, están adiestrados en el uso de dispositivos y ordenadores pero sin perder de vista que tienen manejo para las cosas que a ellos les interesan. Eso no significa que después puedan hacer otras. Cuando tú les planteas la redacción de un documento, un informe o un estudio tienen dificultades porque son nativos digitales, pero no es para eso para lo que ellos utilizan la tecnología. Así que predisposición sí que hay, y tienen una curva de aprendizaje mucho mejor a la hora de introducirles esos cambios y nuevas herramientas, pero ser nativos digitales no significa que hayan nacido sabiendo.
-¿Hasta qué punto las reformas sucesivas educativas permiten innovar o introducir mejoras en el aprendizaje?
-El curriculum en relación a los contenidos, los objetivos de evaluación y los estándares de aprendizaje son los que son y hay que cumplirlos. Ahora bien, dentro del curriculum se puede trabajar de manera diferente en algunos de sus apartados. Hay que tener en cuenta que la LOMCE, LOE, etc nos dicen las cosas que tenemos que dar, pero ninguna nos dice cómo hacerlo. Con lo cual, nosotros tenemos que implementar la metodología para darlo.
-En ese contexto, ¿el docente debe mantener una dinámica de aprendizaje y actualización de contenidos permanente?
-Igual que cualquier otro profesional, su proceso de aprendizaje debe ser constante, a lo largo de toda la vida. El uso de las TIC no tiene que suponer un esfuerzo mayor. En realidad todos utilizamos ya las TIC en nuestra labor cotidiana, Quizás el reto consista en saber utilizar esas TIC en nuestra práctica docente de manera inteligente. Sí que hay que comentar, revisar y formar en nuevas metodologías con el uso de las TIC, pero al igual que hay que formarnos en otras cosas porque toda va evolucionando y posiblemente lo que hoy esté en boga en un futuro lejano -que con las TIC igual hablamos de un año- pues ya no tenga sentido. Con lo cual esa actualización tiene que ser constante. Pero yo apostaría más por perderle el miedo a nuestra propia formación en TIC y focalizar más en la formación metodológica, de manera que si le pido a un alumno que haga un trabajo o una tarea a lo mejor va utilizar una herramienta que desconozco, pero no es problema. No tenemos que conocerlas todas, sino saber valorar para el producto que me está presentando el alumno si puedo orientarle o indicarle a dónde tiene que ir para fomentar el trabajo colaborativo. Hay que perderle el miedo a no saber manejar ciertas cosas y promover que ellos lo hagan.
-¿Qué se espera de los alumnos que inician ahora su formación?
-La Unión Europea marca las competencias clave que, básicamente, vienen a ser las de toda la vida (matemática, lengua...) pero lo que sí es un muy importante son todas las competencias que tienen que ver con el trabajo en equipo, aprender a aprender ... Tú puedes estudiar una carrera pero después tienes que tener la flexibilidad suficiente para formarte y adaptarte al mercado laboral, con un fondo de conocimiento que te permita esa adaptación.
-¿Cómo se puede preparar a los alumnos para desempeñar trabajos que todavía hoy no existen?
-Yo creo que en el fondo tanto con las propuestas "Europa 2020" como con las que tienen que ver con las competencias clave de los alumnos lo que se persigue es formar ciudadanos que, ante una sociedad globalizada sepan adaptarse y buscar su propia formación. Hay muchos estudios que nos dicen que el 90 por ciento de los trabajos que va a haber dentro de veinte años aún ni están inventados, con lo cual tú te vas a formar en una Universidad o en un FP en base a sectores laborales de ahora, y vas a tener que contar con la capacidad de transformación y flexibilidad necesarias para estar preparado para un horizonte diferente.
