Las pesquisas policiales continuaban a última hora de la tarde de ayer sin que, por el momento, se hayan producido detenciones. Sí se ha tomado declaración a varias personas del entorno laboral y personal de la hostelera fallecida, pero todas ellas quedaron en libertad tras su paso por la comisaría. La Policía Nacional no quiere dar por cerrada ninguna línea de investigación, y por eso, de momento, aún no han trascendido los pormenores de un caso que ha conmocionado a la ciudad. El trabajo continúa y las próximas horas serán cruciales para la resolución de un caso con varios interrogantes.

Los agentes desplazados a la vivienda donde se encontró el cuerpo realizaron una inspección a fondo para obtener el mayor número posible de pruebas, y ahora se trata de determinar quién ha sido el autor de los hechos así como el móvil de los mismos.

Lo que sí se ha confirmado a través de la autopsia que se realizó a los restos mortales de la hostelera gijonesa en el Instituto Anatómico Forense de Oviedo es que se trató de un caso de estrangulamiento, como trascendió ya en la tarde del pasado viernes, algo que quedó en evidencia en la primera inspección ocular del domicilio, tras recibir la llamada de alerta de los amigos de Sonia Mitre, nada más encontrar su cuerpo inerte.

La muerte violenta de la gijonesa se suma en menos de un año al caso de Andrés Valdés Bermejo, que apareció acuchillado en su domicilio de Nuevo Roces en septiembre del año pasado, un caso que conmocionó al barrio y que se resolvió en apenas dos días. En aquel caso, el asesinato se produjo en un contexto de trapicheo de drogas y ajuste de cuentas.