El presidente de la patronal del transporte Asetra, Ovidio de la Roza, puso ayer en duda la viabilidad de reactivar la Autopista del Mar entre los puertos de El Musel y Montoir de Bretagne (Nantes-Saint Nazaire) "en tanto en cuanto al menos no venga realmente una empresa, una naviera con capacidad, con experiencia y que apueste en serio realmente por esa autopista del mar. En tanto no ocurra esto, yo mucho dudo y casi apuesto a que no tendremos autopista del mar en mucho tiempo".

Respecto a la oferta que ha hecho para hacerse cargo de la línea la empresa Naviera Riva Suardíaz S.L., propiedad del gijonés afincado en Madrid Rafael Riva Meana, Ovidio de la Roza se mostró escéptico: "Creo que no tiene consistencia, que no tiene ningún apoyo detrás claro y contundente, creo que no hay ningún plan y si hubiera ya al menos debiéramos conocer los potenciales usuarios y por lo tanto me parece que es una forma de entretener el tiempo" para favorecer mientras tanto desde el Ministerio de Fomento a la Autopista del Mar entre Vigo y Montoir de Bretagne, en opinión del presidente de Asetra, haciendo que la ruta marítima de Gijón "desaparezca del mapa, además en un tema de multimodalidad, que es lo que tiene futuro", poniendo como ejemplo de ese potencial lo que está ocurriendo con las autopistas del mar en el Mediterráneo, que ya han captado más de la mitad del tráfico de camiones internacional.

Rafael Riva Meana negoció con la naviera que explotaba hasta el pasado septiembre la línea, la francesa LD Lines, la compra de la sociedad que formalmente es la adjudicataria, GLD Atlantique, lo que le permitiría aprovechar el cobro de subvenciones que aún no se agotaron. El problema es quién asume los posibles quebrantos que tendría la sociedad en el caso de que se le exija la devolución de ayudas públicas por España y Francia o por la UE.

Al margen de esa propuesta, las navieras francesa Brittany Ferries y española Grupo Suardíaz, también han estado estudiando la posibilidad de hacerse con la línea.