Una jornada después de que saltaran las alarmas ante la presencia de medusas en el litoral gijonés, el equipo de Salvamento de playas destacaba ayer la ausencia de incidencias tanto en los arenales urbanos como en los del área periurbana donde el pasado fin de semana tuvo que ser atendido un niño tras sufrir una importante reacción alérgica. El incidente de produjo en la mañana del sábado, cuando el pequeño entró en contacto con restos de varios ejemplares en estado de descomposición de "Rhizostoma pulmo", una variedad muy urticante que se reconoce fácilmente por sus bordes de color azul intenso. Esa alarma llevó a cerrar al baño la playa de Estaño y también se localizó algún otro ejemplar en la de Serín, aunque sin afectación a los bañistas. Horas después, en el litoral maliayés una embarcación de recreo localizó otros cuatro ejemplares más de "Rhizostoma pulmo", uno de ellos de 45 centímetros. Los expertos aconsejan no acercarse a ellos debido a su alta toxicidad.

Lo que sí se van a encontrar los bañistas que acudan estos días a los arenales del municipio son las cotas más altas de mareas. El pleamar de hoy, a las 18,28 horas, será de 4,65 metros. La de ayer fue de 4,62 metros.