Aunque la gestión y el mayor porcentaje accionarial de la Terminal de Contenedores de Gijón va en el paquete, el principal objetivo que conseguirá la multinacional danesa con la compra de TCB es contar con terminales en algunos de los puertos incluidos en las grandes rutas de contenedores transoceánicas, como son los de Barcelona y Valencia, además de posicionarse en el Pacífico colombiano, donde TCB cuenta con una terminal en el puerto de Buenaventura.
En el caso de España, los grandes puertos que conectan con las rutas transoceánicas de contenedores son los de Algeciras, Valencia y Barcelona. Hasta ahora el grupo Møller-Maersk sólo cuenta con terminal en el de Algeciras y tras la operación pasará a tener en los tres. Su principal competidor, MSC, dispone por su parte de una terminal en Valencia.
Las terminales portuarias del grupo TCB en España son la de Castellón, las de Santa Cruz de Tenerife y La Palma (ambas en Canarias) y las ya citadas de Gijón, Barcelona y Valencia. La de Barcelona tiene una capacidad para mover anualmente 1,4 millones de TEU y la de Valencia 975.000 frente al tope de 90.000 que podría mover como máximo en sus cuatro hectáreas de concesión la terminal de El Musel. La terminal se encuentra en los muelles de La Osa y los planes del Puerto cuando decidió ampliar El Musel pasaban por trasladarla al terreno que ahora ocupa EBHISA y ésta al nuevo Muelle Norte.
La terminal gijonesa es la menor de todo el grupo en venta. En la cornisa cantábrica, el puerto de mayor tráfico de contenedores es el de Bilbao.
