Un incendio originado en un cuarto de contadores eléctrico obligó a los Bomberos del Ayuntamiento de Gijón y a la Policía Local de la ciudad a desalojar ayer a los vecinos y a los trabajadores de los pisos y las oficinas situados en el edificio número 3 de la plaza Nicanor Piñole, en la zona centro de la ciudad. Los hechos tuvieron lugar alrededor de las once y media de la mañana. A pesar de que la intervención de los nueve efectivos de extinción de incendios desplazados hasta la zona fue "muy aparatosa", tal y como recalcaron ayer fuentes municipales, el suceso se saldó sin daños personales.
Un particular alertó de lo sucedido a los bomberos tras percatarse de que las dos escaleras del edificio se estaban llenando de humo. La intensa humareda fue, precisamente, lo que obligó a los funcionarios a desalojar el edificio. Además de los vecinos tuvieron que salir del inmueble los trabajadores de las empresas con sede en el número 3 de la plaza Nicanor Piñole: un despacho de abogados, una gestaría y una autoescuela. El incendio obligó a cortar la electricidad en todos estas empresas, que por la tarde aún no habían podido volver a la normalidad. El suceso hizo, además, que se colara "mucho humo" en otros negocios situados en las inmediaciones como el kiosco y la librería de la cercana calle Alfredo Truán.
Las primeras investigaciones de los Bomberos del Ayuntamiento de Gijón apuntan a que un cortocircuito provocó las llamas que obligaron a trabajar a los funcionarios de extinción de incendios en la zona durante casi dos horas.
Hasta el lugar del suceso acudieron además técnicos de la compañía EDP y de otras empresas de suministro eléctrico. La situación no se pudo dar por controlada hasta la una de la tarde. Desde el Ayuntamiento de Gijón aseguraron ayer que "el acceso a los contadores quemados fue difícil porque el cuarto en el que se encontraban es muy estrecho y alargado".
