M. C.

El juicio previsto ayer en la sección octava de la Audiencia Provincial, con sede en Gijón, por una agresión durante un partido de fútbol entre aficionados, no llegó a celebrarse al pactar la defensa y las acusaciones la condena para el acusado, cuyas iniciales son D. G. C., según indicaron ayer fuentes jurídicas.

El acusado será condenado a un año de prisión, a no poder participar en ninguna competición deportiva durante ese tiempo y al pago de cerca de 6.000 euros por haberle roto la nariz y dos dientes a un rival durante un partido de fútbol, dándole un fuerte cabezazo en la cara, en un momento en el que el balón estaba en otra parte del campo. Ambos jugadores no tenían relación anterior entre sí.

La pena de cárcel es inferior a la que inicialmente pedían la fiscalía y la acusación particular; 21 meses de prisión y tres años de cárcel, respectivamente. Al pactar la condena, el acusado evitará su ingreso en prisión, al ser inferior a los dos años. En cuanto a lo relativo a la no participación en competiciones, es tal como pedía la fiscalía, mientras que la indemnización que tendrá que afrontar es superior a la solicitada por el fiscal, pero inferior a la pedida inicialmente por la acusación particular.

Los hechos tuvieron lugar el 5 de abril de 2014 en un encuentro de fútbol 7 que se celebraba entre equipos de dos empresas distintas, en el campo del Tragamón, en Cabueñes. En un momento dato, y al margen del juego, con la intención de menoscabar la integridad física de la víctima, I. M. A., y cuando éste se acababa de levantar del suelo, D. G. C. le propinó un fuerte cabezazo en la cara. El golpe dejó semiinconsciente a la víctima, que tuvo que ser trasladada de urgencia al Hospital de Cabueñes.

I. M. A. sufrió una herida en la mucosa interna del labio superior que requirió de sutura, fractura parcial de los incisivos superiores derecho e izquierda y fractura de los huesos propios nasales. Las heridas le tardaron en curar 21 días y le quedaron como secuelas la desviación izquierda de la pirámide nasal, con ligera insuficiencia respiratoria, además de fractura parcial de los incisivos, lo cual es susceptible de reparación odontológica.

La condena pactada ayer incluye que D. G. C. tendrá que indemnizar con 5.500 euros al agredido, además de hacerse cargo de unos gastos médicos de 414 euros derivados de la agresión: 130 euros por la visita a urgencias y 70 euros por cada una de las cuatro consultas posteriores.