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Los afectados por parálisis cerebral exigen más autonomía

El colectivo demanda asistentes para poder llevar una vida independiente

La lectura del manifiesto, ayer en Aspace. ángel gonzález

Más autonomía y más apoyos para poder emprender una vida independiente. Las personas afectadas por parálisis cerebral celebraron ayer su día mundial con una reivindicación clara: "una convivencia sana y justa, como iguales".

Para ello los usuarios del Centro de Apoyo a la Integración de Aspace en Gijón salieron ayer a la calle para leer un manifiesto con varias reivindicaciones que, en la vida diaria, se hacen fundamentales para fomentar la autonomía. Como la de que "tener dificultades comunicativas no implica discapacidad intelectual, pero en cualquier caso, no te dirijas a nosotros como a un niño", recordaron. Y también señalaron que "aunque sabemos que la sobreprotección siempre tiene buenas intenciones y pretende nuestro bienestar, el verdadero valor de nuestras elecciones viene del hecho de que son nuestras".

Piezas todas ellas clave para evitar en la medida de lo posible los casos de incapacitación jurídica, lo que sería posible, señalan, "aportando los apoyos necesarios para garantizar nuestra autodeterminación".

Y en esa autodeterminación juega un papel fundamental también el respeto al deseo de muchos de los afectados por parálisis cerebral de "vivir en pisos tutelados, con nuestras parejas o compañeros de piso", y en el caso de que no sea posible, "las residencias deben dirigirse, poco a poco, hacia modelos más normalizados", reclaman. Así, piden centros de menor tamaño, "ubicados en los núcleos urbanos y no en la periferia, donde poder elegir a los compañeros y donde poder desarrollar una vida en pareja sana".

Participación activa

Del mismo modo, también reclaman poder participar más activamente en la gestión de los centros que les prestan apoyo, recibiendo formación para poder ser miembros de pleno derecho de las juntas directivas y que los socios de la entidad sean ellos mismos, "no nuestros padres o tutores; además, querríamos poder optar a los puestos laborales de los centros y ser preparados para ello", afirman.

Por último, exigen una apuesta "firme y real" por la figura del asistente personal para hacer realidad la independencia en todos los aspectos de la vida.

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