El control y la coordinación de los fondeos, atraques y llegadas de barcos a El Musel vuelve a estar, desde la pasada medianoche, en manos de la corporación de prácticos del puerto gijonés.

La Autoridad Portuaria de Gijón ha suspendido cautelarmente el convenio que había suscrito con Sasemar sobre información, instrucciones y coordinación del tráfico marítimo en el puerto de El Musel, debido a los problemas detectados en la prestación de este servicio desde la torre de Salvamento. Sasemar había comenzado a prestar ese servicio el pasado uno de junio. El convenio suponía el pago de El Musel a Sasemar de 250.000 euros por un servicio que, según recalcaron los prácticos, ellos han venido prestando tradicionalmente de manera gratuita.

Con la suspensión del convenio, el nuevo presidente de la Autoridad Portuaria, Laureano Lourido, paraliza una medida adoptada por su predecesora en el cargo, Rosa Aza, que se puso en marcha en medio de la polémica. Los prácticos pidieron desde el principio revisar un protocolo de actuación que tilda del confuso y burocrático. Ahora vuelven a tomar el control, mientras el Puerto decide cuál va a ser la solución definitiva.