Media docena de personas asistieron ayer, en la sede del Ateneo Obrero, a la asamblea convocada por la Plataforma Cultura para el Arango, que lidera Boni Ortiz y que tiene como finalidad, desde hace años, convertir el viejo cine Arango en una sala pública polivalente bajo el patrocinio del dinero público.
En la asamblea, Boni Ortiz explicó los pasos que está dando la citada plataforma para conseguir sus fines, aunque aún no hay una estimación objetiva del presupuesto que se requeriría para volver a convertir el inmueble de la calle de la Merced en un espacio cultural. Hay que recordar que hasta hace un año fue la sede, en Gijón, de Corporación Dermoestética, empresa que, en su día, derribó todo el interior del viejo cine para acondicionar el local a sus fines. Asimismo, Boni Ortiz explicó que ahora habrá que entablar gestiones con los grupos políticos del Ayuntamiento de Gijón para determinar "las posibilidades reales" de llevar adelante la idea de la plataforma que lidera.
En Gijón existen actualmente dos grandes teatros públicos: el Jovellanos y el de Laboral Ciudad de la Cultura, y varios de mediano porte en los centros municipales de La Calzada, El Llano y Pumarín, respectivamente.
