La multinacional estadounidense Tenneco Automotive ya tiene sobre la mesa dos ofertas en firme para hacerse con su fábrica de amortiguadores de Gijón. Así lo transmitió ayer el director de la factoría, Michael Church, al comité de empresa, a los que trasladó una escueta información sin desvelar ni los nombres de los postulantes ni si son empresas y de qué tipo o fondos de inversión.

Tras el encuentro con la parte social, Tenneco indicó que "la compañía se encuentra ahora en el proceso de revisión de las ofertas y está pidiendo a cada comprador potencial que proporcione información adicional de apoyo a sus ofertas", proceso que estima que se prolongará durante unas dos semanas.

Fuentes sindicales añadieron que lo que está pendiente de recibir Tenneco es la información completa sobre los respectivos plantes industriales de ambos candidatos.

Una de las incertidumbres es si ambos candidatos garantizan la continuidad en la empresa de los 116 trabajadores que tiene actualmente la plantilla. En una de las reuniones de la comisión de seguimiento sobre el proceso de venta en la que participan empresa, sindicatos y Principado, la empresa no dio garantías al respecto.

Ese es uno de los temas que volvieron ayer a plantearse y en el que los sindicatos volverán a insistir en la próxima reunión de la comisión, prevista para finales de noviembre y en la que la multinacional prevé abundar en la información sobre los potenciales compradores.

El proceso de venta ha provocado una división entre los sindicatos. CSI se mostró ayer muy crítico con el mismo al considerar que los probables candidatos son dos "fondos buitre". Este sindicato va a solicitar formalmente una reunión con el Principado y también quiere promover la convocatoria de una asamblea de trabajadores, iniciativas a las que quiere que se adhieran los demás miembros del comité de empresa, que suman la mayoría en el citado órgano y que actualmente mantienen criterios diferentes.

Este sindicato considera que Tenneco tiene que comunicar ya los nombres de los dos finalistas en el proceso de venta, para cumplir con el Estatuto de los Trabajadores. La multinacional en cambio sólo desvelará el nombre del ganador, una vez seleccionado.