Vender es el primer objetivo de cualquier empresa, y de un tiempo a esta parte, en todo el mundo y desde el principio de su actividad. Es la lección que ayer se llevaron los alumnos de tercer y cuarto curso del grado de Comercio y Marketing de la Facultad de Comercio que ayer participaron en la Jornada Asturias Exporta.

Una sesión en la que pudieron conocer de primera mano las experiencias de las empresas asturianas en el mercado exterior, con la primera lección de que "las empresas no son algo inalcanzable", como apuntó a los alumnos Javier Parra, director territorial de Comercio e ICEX España Exportación e Inversiones. Parra puso de relieve el cambio de mentalidad que se está dando entre las compañías asturianas, que de un tiempo a esta parte se caracterizan por lanzarse al comercio exterior desde su misma creación. "Suelen ser empresas nacidas de una idea brillante, impulsadas por un grupo pequeño de gente y con vocación internacional desde el principio", explicó a los estudiantes.

Es el caso de "Twave", una empresa creada hace apenas un año de la mano de tres ingenieros de la Escuela Politécnica gijonesa. La compañía se dedica a la creación y venta de instrumentos electrónicos para determinar el estado de las máquinas industriales antes de que se produzcan fallos, en lo que se llama "mantenimiento predictivo". "Desde el primer momento tuvimos claro que nuestro mercado era internacional, no tiene sentido vender sólo en España porque los clientes están en todo el mundo", explicó al auditorio José Ramón Blanco, uno de los socios fundadores de la empresa.

Es el mismo caso de KPS Soluciones de Energía, dedicada a la venta de material eléctrico. Nacida en Asturias, ya cuenta con oficinas permanentes en México DF y China. Abrió en 2012, y como indicó Juan Ramón Santos, director de Operaciones y Medios, "hemos estado desde el principio en el mercado internacional".

Manuel Vega-Arango, director de Flicormor, presentó por su parte el consrocio de exportación North Spain Aggregates, para la venta de áridos al exterior y ante la constatación de que "es necesario promover la comercialización de productos en el mercado exterior".

Alfonso del Río, director general de la Sociedad de Promoción Exterior del Principado (Asturex) llamó por su parte a los alumnos a "estudiar inglés" como baza principal y a "cambiar la imagen del vendedor, porque la gran mayoría acabaréis trabajando en los departamentos comerciales de las empresas". Junto con la "paciencia para acabar vendiendo en el exterior", Del Río apuntó a la "motivación y la ilusión" como las principales tarjetas de presentación de todo emprendedor en el extranjero. "Cuanto más mejor".