De una excesiva reticencia a acudir al psiquiatra se ha pasado a un abuso excesivo de las consultas y en el consumo de medicamentos, señaló ayer el psiquiatra Guillermo Rendueles durante las XI Jornadas Jovellanos de Divulgación Científica en el Antiguo Instituto. Rendueles analizó el papel de esta especialidad médica en el siglo pasado y su posible evolución para los próximos años. "Hasta final de siglo se pasará por un aumento de antidepresivos y medicalización", destacó.

El especialista indicó que "el abuso de los medicamentos supone una pérdida de libertad y autonomía" y añadió que considera esta situación "un proceso de servidumbre". "La gente se deja dominar, pierde la propiedad de sus actos y renuncia a vivir juicios propios y vidas diferentes", subrayó.

En su charla, que recibió el título de "La psiquiatría del siglo XXI", destacó que el perfil principal de paciente en Asturias es el de mujer mayor de 65 años: "Más de la mitad de las mujeres asturianas de esa edad toma ansiolíticos". Sobre las posibles causas de esta situación incidió en que "la gente no sabe llevar la vejez durmiendo mal o durmiendo poco, o con achaques, y busca soluciones. Y a veces la medicina promete cosas que luego no da. La gente tiene aspiración a vivir en esa especie de limbo".

Rendueles también analizó el perfil del profesional que ejerce la psiquiatría. Y en este aspecto se posicionó con los más veteranos y su perfil más conservador. "Por ser una actividad muy artesanal, donde no hay ese saber tan científico como en las especialidades punteras, los más viejos son un poco más conservadores y los más jóvenes son un poco más incisivos. Si en la medicina normal eso es bueno, en la psiquiatría no estoy tan seguro. Hay una propaganda muy fuerte de los laboratorios en la psiquiatría que incide sobre las nuevas generaciones y lo más viejos estamos un poco más vacunados de ese proceso biocomercial que llaman ahora", reflexionó.

Las jornadas se clausuran hoy con la última charla, que corre a cargo de María del Rosario Heras, presidenta de la Real Sociedad Española de Física (RSEF), sobre los "Edificios enfermos".