Diez conductores arrojaron un resultado positivo en los test de alcoholemia realizados por la Policía Local el pasado fin de semana. Ocho de estos ciudadanos fueron denunciados por la vía administrativa por arrojar en los controles un resultado inferior a 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Los otros dos fueron detenidos acusados de un delito contra la seguridad vial. Los agentes impusieron además seis denuncias a los responsables de otros tantos locales de hostelería acusados de carecer de las licencias pertinentes o presentar deficiencias en los locales.