La Policía Nacional ha detenido al dueño de una tienda de artículos de segunda mano de Gijón acusado de ofrecer a sus clientes objetos que habían sido robados. Los funcionarios de la Comisaría de Policía de El Natahoyo llevaron a cabo este arresto dentro de la labor de "control periódico" a la que los agentes someten a los responsables de este tipo de negocios. Gracias a una de estas supervisiones los investigadores "detectaron varias anomalías en el local".

El ahora detenido no había informado de la adquisición de los productos que luego exponía al público en su escaparate, tal y como exige la regulación de este tipo de establecimientos. Una portavoz de la Comisaría de El Natahoyo aseguró ayer que "esta información era omitida para tratar de eludir la supervisión policial, por lo que una vez constatados los deficientes datos aportados y la práctica incorrecta que se llevaba a cabo en el negocio, los investigadores efectuaron un control sobre toda la mercancía".

Al revisar los productos que el ahora arrestado tenía a la venta los investigadores descubrieron dos teléfonos inteligentes que figuraban en las bases de datos del Cuerpo Nacional de Policía como robados y que aún no habían sido vendidos. No era la primera vez que el detenido comercializaba un móvil previamente sustraído. Los agentes aseguran que el reo ya había "colocado" en el mercado de segunda mano otros tres teléfonos que habían sido robados en locales de ocio nocturno de Gijón.

Tras realizar estas comprobaciones el gerente de este negocio -un hombre que contaba con varios antecedentes penales por otros delitos cometidos en el pasado-, fue arrestado como responsable de un delito de receptación.

Una vez practicada la detención los agentes devolvieron uno de los teléfonos móviles robados a su legítima propietaria. Gracias a esta investigación también fue identificado y detenido un hombre de 44 años y con un amplio historial delictivo que había sido identificado como el presunto autor del hurto de uno de los terminales intervenidos. El acusado le había quitado el móvil a la empleada de un centro de salud de la ciudad aprovechando un descuido.