Utilizar impresoras 3D a gran escala para fabricar elementos constructivos a escala real, usando materiales avanzados, es el objetivo del proyecto Build3-Print, que promueve un consorcio liderado por la empresa Cementos Tudela Veguín, del grupo Masaveu Industria.
En la mañana de ayer tuvo lugar la reunión de lanzamiento del nuevo proyecto en las dependencias de la Fundación Prodintec, una de las entidades colaboradoras en el mismo junto a la Universidad de Oviedo y a la Universidad de Vigo. Además de representantes de estas entidades y de Tudela Veguín, en la reunión también participaron miembros de Coprosa y de Digafer, sociedades que integran junto a Tudela Veguín el consorcio que va a desarrollar este proyecto innovador, que es pionero en España.
Con este proyecto, calificado por sus promotores como "revolucionario", se plantea el desarrollo de un proceso productivo integral para la industria de la construcción, basado en tecnologías de impresión 3D a gran escala.
Entre las ventajas que ofrecerá este sistema respecto a los métodos tradicionales de construcción de edificios y de obra civil, están las mejoras en seguridad, la optimización de los tiempos de fabricación, la minimización de la necesidad de encofrados y la disminución en el uso de materias primas lo que se traduce a su vez en una reducción de emisiones contaminantes.
Este proceso en ciernes supone avanzar en la industrialización del sector de la construcción, algo que hará posible la producción mediante las impresoras 3D de grandes dimensiones de elementos constructivos a escala real, algo para lo que será preciso en este proyecto avanzar en la investigación y formulación de nuevos y modernos materiales avanzados de construcción, que sean imprimibles y compatibles con esta nueva tecnología. Además, en este proyecto también habrá que definir las nuevas metodologías de producción basadas en las técnicas de impresión 3D a gran escala.
El nuevo proyecto puesto en marcha ayer, que cuenta con el aval del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), es la continuación del proyecto Con3D, finalizado el pasado mes de mayo y que supuso el desarrollo de un proceso automatizado de fabricación de estructuras mediante la tecnología de impresión 3D para el sector de la construcción, procesándose mediante impresión 3D materiales tradicionales como morteros y hormigones -los más usados en el sector- desarrollando un proceso totalmente industrializable, más allá de una mera prueba piloto.
Con este nuevo proyecto, el consorcio liderado por el grupo Masaveu avanza en la introducción de las nuevas tecnologías en el sector de la construcción.
