El libro "Gijón ilustrado" tiene su origen, no tan lejano, en la exposición que Manuel Iglesias hizo de su dibujos de técnica digital, en el 2013, en la sala de la Fundación Alvargonzález. Entonces ya mostró algunas de sus creaciones gijonesas, junto con las que recogían sus viajes y estancias en otras ciudades, bajo el título "Dibujos 2.0".

En estas composiciones, en las que son rastreables muchos de los recursos del mundo del cómic, hay un "Gijón real vivido a pie de calle", tal y como dictamina Héctor Blanco, una ciudad que el autor de la obra "invita a conocer y a reconocer". Es el resultado de una perspicaz observación de los entornos cotidianos, que el dibujante plasma sin renunciar a su punto de vista, a esa manera cómplice y un punto divertida de ver las cosas.

Manuel Iglesias, que sigue recordando aquellos años de lápiz y plumilla, cuando surgían del papel los rincones amados de Viavélez, dibuja ahora directamente con lapicero digital en la pantalla del ordenador. Perfila las líneas, una de las características de sus trabajos, y colorea los dibujos hasta que éstos alcanzan el necesario estadio de exactitud y frescura.

"Gijón ilustrado" muestra las imágenes de una ciudad reconocible y, a la vez, nueva. Manuel Iglesias pone su talento al servicio de una visión sensible e inteligible de su villa natal. Es el libro de un apasionamiento por las calles y sus gentes.