Cerrarán el año por encima de los 30 millones de euros. Lo que empezó como una pequeña empresa enfocada a las telecomunicaciones para el sector de tiendas y tráfico internacional con el Operador Orange cuenta, entre las empresas del grupo, con 400 trabajadores, con un 60% de empleos indefinidos. El Grupo Comunicalia recibió el pasado domingo el premio a la Consolidación Empresarial que otorga AFAS (Asociaciones Federadas de Autónomos en Asturias). Su presidente, Jorge Morán (Mieres, 1971), apostó por su idea en 2009, en compañía de Armando Morán y Oliver Suárez. Ahora han convertido el Grupo Comunicalia, con sede inamovible en Asturias, en un referente del sector de las telecomunicaciones.
-¿Qué supone el premio?
-Siempre es agradable una palmada en la espalda. Es el primero que nos conceden y no lo esperábamos. Además no pertenecemos a la asociación por lo que doblemente satisfechos. En nuestra filosofía no está presentar candidatura a unos premios. Eso deben ser otros los que te propongan. No uno mismo. Pero el premio supone que no lo estamos haciendo mal. Es un aliento que te ayuda a seguir empujando y creciendo.
-Empezó como algo pequeño y ha despuntado. ¿Se esperaban el éxito?
-Si te dijera que sí, mentiría. Teníamos un plan de negocio donde tendríamos siete tiendas, no íbamos a tener empresas, seríamos mayoristas de canal internacional o mayoristas de "low cost" del negocio de Orange y poco más. Y si eso nos planteábamos algo de empresas en Asturias y ahí va que nos va. Pero se nos fue de las manos. Somos la tercera cuenta de Orange España en empresas, la primera en el norte y noroeste. Estamos en el top 10 nacional. Somos los número uno de los mayorista de low cost y uno de los cinco distribuidores de fibra de España. Y todos esto desde Asturias, que es más complicado.
-¿Se van a ir de Asturias?
-Hago más de cien noches de hotel fuera de casa. Quiero mucho a mi familia y prefiero que sigan viviendo en Asturias, que se vive mucho mejor, y ser yo el que se sacrifique. La idea no es llevar la empresa a Madrid pese a que en temas de impuestos sería más beneficioso. Tenemos que defender lo nuestro y lejos de nuestro ánimo está el movernos de Asturias.
-¿Se puede ser joven, asturiano y trabajar en esta región?
-Iría más allá. Se puede ser joven, asturiano, trabajar en Asturias y tener un empleo digno. Me indigna que se diga que la contratación que hay es eventual. No voy a decir que no la haya, pero también hay contratación de calidad. Nosotros estamos creciendo, contratando gente. Sí se puede y sí se debe. Los asturianos debemos ser más positivos con el futuro que nos viene pese a las complicaciones que tenemos en esta provincia, mayores que en otras regiones. No es imposible.
-Aún hay jóvenes que se tienen que ir de Asturias. Muchos.
-Hay que animar a la gente a que sea emprendedora. Vengo de familia de mineros, de la cuenca, y soy bastante conocedor de una región que depende de una empresa semipública, muy apalancada en un sector que tiene fecha de caducidad. Una parte se acomoda, esperando que continúe en el tiempo y no evolucione. Luego ves gente joven, emprendedora, buscando nuevas oportunidades fuera de los segmentos tradicionales. Nos caracterizamos por ser un pueblo emprendedor, que cruzó el mar en su día y se marchó a trabajar, con experiencias de éxito. Otras no tanto. Tenemos que recuperar ese espíritu, retomar la bandera de la Reconquista, para hacer una reconquista empresarial en Asturias. Cada vez hay más jóvenes empresarios, asturianos, que son ejemplo de éxito. Es importante que esas historias se sepan. Sí se puede tirar para adelante, crecer y emprender desde Asturias hacia el mundo. No desde los asturianos por el mundo.
-¿No está manido el tema de ser emprendedores?
-Nos gusta poco llamar a las cosas por su nombre. Vemos algo malo en ser autónomo y en ser empresario y hacemos giros para decir emprendedor. Al final todo es lo mismo. Tener una inquietud, ponerla en marcha y generar un proyecto. Si te va bien sumarás más gente, crearás trabajo y riqueza. ¿Qué manera tenemos de compensar los puestos perdidos en la minería y en el acero? Pues no sé si tendría que ser con servicios, turismo o fabricar naves espaciales.
-¿Se podría volver a vivir sin telecomunicaciones?
Hoy en día si nos quedamos sin batería en el móvil es el fin del mundo. Como dice el chiste, puedes vivir sin fumar, sin beber, pero se te va a hacer muy largo. Volver atrás sería dificilísimo. Las nuevas generaciones, que nunca vivieron lo otro, sería imposible que se hagan a la idea.
-Apoyan el deporte. ¿Compromiso o plataforma de lanzamiento?
-Es por lo que más se nos conoce. Antes que un periodista de economía, antes de hablar de datos, tuvimos como doscientas entrevistas por patrocinar al Sporting, al Oviedo, al Juanfersa o a Ángela Pumariega, por ejemplo. Tienes más repercusión por temas ajenos a tu negocio. Pero el balonmano y la vela no son masivos y no hay un retorno de ese patrocinio. Es un compromiso con la sociedad y en la medida que puedas algo debes devolverle a la sociedad. Nosotros vemos el deporte es una forma. Ayudamos también en deporte base, que no le damos notoriedad ni repercusión. En la medida que puedes, colaboras. Igualmente con temas humanitarios. Tradicionalmente entregamos a una ONG una cantidad que parte del dinero que ponen los empleados. Comunicalia iguala esa cifra y también Orange. Y se lo damos a una ONG que seleccionan los propios trabajadores. Hace tres años fue el Banco de alimentos, el pasado año a "Ningún niño sin cenar" y este año a "Mensajeros de la Paz" donde el propio padre Ángel recogerá el dinero este próximo sábado.
-¿Los empresarios no son solidarios porque desgrava?
Me gustaría que me dieran la explicación. ¿Qué tendrá que ver? Muchos somos empresarios por accidente, tuvimos que tomar una decisión, en un momento determinado, como montar un trabajo aquí por no tener que irte fuera. Al principio pareces un tipo simpático que montas un negocio en Asturias. Luego cuando te empieza a ir bien te conviertes, de pronto, en empresario explotador. No machaquemos, fomentémoslo.
-El grupo que preside ha patrocinado tanto al Real Sporting y al Real Oviedo. ¿Qué le sienta mejor, el azulón o el rojiblanco?
-Quiero que los dos equipos estén en primera división.
-No venga con que es usted del Caudal.
-(Risas) La gente sabe que soy sportinguista y que voy al Molinón con mi hijo.
