"Homines dum docent discut". En latín, y parafraseando a Séneca: "Los hombres aprenden mientras enseñan", tradujo Ángel Martín al hablar del espíritu del libro que acababa de presentar en compañía de los coautores Vicente Fernández y David Álvarez, "Proyectos singulares de movimientos de tierras".

El libro supone un nuevo aprendizaje en una profesión en constante dinanismo por la incorporación de las nuevas tecnologías. Pero también resulta imprescindible asumir los valores y la ética profesional. Un compromiso que defienden los propios autores del libro. De ahí el cariz humano que desprende el análisis de los proyectos seleccionados y que ayer dejaron latente durante la presentación.

"De nada sirve crear grandes profesionales si se deja de lado los valores sociales", espetó ayer David Álvarez en presencia del director de la Escuela de Ingenieros, Juan Carlos Campo. Esa filosofía se transmite en el libro que además sirve para poner en valor el trabajo de los compañeros. El libro relata "la vida de unas personas con una serie de problemas y los solucionan con unos medios muy limitados, algo extensible a la vida común de cualquier persona", resumió David Álvarez.

Los objetivos deben tener en cuenta otros compromisos como el medioambiental. "Las obras son complejas por el entorno, siempre se intenta que el paisaje sea lo más natural posible, restaurarlo como estaba", confirmó Vicente Fernández para quien la restauración de la senda del río Cares y reposición del deslizamiento del talud, capítulo del libro, "fue la que más riesgo de ejecución tenía por la innovación que supuso las técnicas que empleamos", argumentó Fernández tras la presentación ayer en la Escuela Politécnica de Ingeniería de Gijón.

El libro selecciona ocho proyectos de entre más de un millar de labores realizadas por la empresa de movimiento de tierras Excade. El elenco lo forman, además del río Cares, el dragado por medios terrestres en el Puerto de Ribadesella, proyecto constructivo de restauración de una ladera, formación y ampliación del depósito de residuos sólidos urbanos de Cogersa, desdoblamiento del colector interceptor del río Piles en el tramo de Viesques al parque Isabel La Católica, aplicación de infraestructuras industriales en el polígono industrial de Cancienes, demolición de la chimenea de la antigua azucarera de Pravia y el sellado total y racionalización geométrica del depósito Cerro del Agua.