El teatro Jovellanos aplaudió ayer la maestría en escena, sin grandes artificios, de Charo López -en la foto-. La salmantina dio vida a la Celestina en la obra "Ojos de agua", un monólogo dirigido por Yayo Cáceres y con dramaturgia de Álvaro Tato, en el que la actriz se acompaña de Fran García y Antonio Trapote.