El coste de la reparación de los graves daños estructurales que sufrió una de las tres grúas-pórtico de la terminal de graneles sólidos de El Musel, Ebhisa, el pasado 6 de enero pueden rondar los seis a siete millones de euros, según han coincidido diversas fuentes. Se trata de una cifra que representa más de la mitad del precio de una instalación nueva de este tipo, que oscila entre los 9 y los 12 millones de euros según el equipamiento de que se dote. Los tres pórticos de la terminal granelera son propiedad de la Autoridad Portuaria de Gijón, que los tiene alquilados a Ebhisa, empresa de la que es además su accionista mayoritario.
El pórtico número dos, el más cercano a las oficinas de la empresa, ha quedado inoperativo después de que las fuertes rachas de viento, de 130 a 140 kilómetros por hora que se registraron aquella noche, desplazaran la grúa -de unas 1.200 toneladas de peso- haciendo que empotrara la pluma contra la chimenea del granelero "Anangel Trust", sin que el gruísta pudiera hacer nada para impedirlo. El golpe provocó daños en la chimenea del barco y también en la pluma de la grúa, aunque los desperfectos más graves no se debieron al choque en sí, si no a la torsión a la que se vio sometido el pórtico al quedar enganchado a la chimenea del barco. El balanceo del granelero retorció la estructura principal de la grúa.
La reparación para que vuelva a estar plenamente operativa requerirá la renovación total de la estructura principal. La opción más barata de tratar de enderezar los hierros, supondría limitaciones en la operatividad del pórtico, según las fuentes consultadas. La negociación de Ebhisa con la compañía aseguradora, así como la reparación de la grúa, se prolongarán durante más de un año. La compañía aseguradora está barajando declarar siniestro total a la grúa-pórtico, con lo que reduciría la indemnización a unos dos millones de euros.
El largo tiempo que tendrá que permanecer Ebhisa sin uno de sus tres pórticos supondrá un problema en la operatividad de la terminal, pero no un riesgo para la garantía de aprovisionamiento de suministros de las factorías asturianas de ArcelorMittal y de las térmicas de EDP, sus dos principales clientes, además de accionistas minoritarios de Ebhisa.
Ebhisa operó entre 1990 y octubre de 2001 con sólo dos pórticos, dado que el tercero no se instaló hasta ese año (con un coste para el Puerto cercano a los 9 millones de euros). Fuentes sindicales sostienen que con dos pórticos operativos se pueden descargar sin problemas 13 millones de toneladas anuales, cifra que podría incluso ser mayor, tal como ocurrió en 2000 cuando por Ebhisa se movieron 14,3 millones de toneladas con las dos grúas que sólo tenía por entonces la terminal. El año pasado en Ebhisa se descargaron 15,4 millones de toneladas, después de seis años sin alcanzar los 12,5 millones anuales.
Ebhisa está estudiando el alquiler o la adquisición de una grúa automóvil mientras no recupere el tercer pórtico. Eso evitaría la posibilidad de que algunos clientes optaran por llevar los barcos de tamaño mediano al Nuevo Muelle Norte de la ampliación, donde ArcelorMittal ya descargó un cargamento de hierro durante una huelga en Ebhisa. Responsables de Ebhisa y de la siderúrgica mantendrán una reunión la próxima semana para abordar las alternativas, entre las que la siderúrgica no descarta tener que llevar a algún barco a la ampliación.
La terminal granelera también ha pedido a sus principales clientes que planifiquen con mayor precisión la llegada de sus cargamentos. La descarga en el muelle de Ebhisa es la opción principal tanto para Arcelor como para EDP. La siderúrgica tiene conectadas sus instalaciones con la terminal granelera por cintas transportadoras, mientras que las térmica de Aboño y de Soto de Rivera pueden recibir sus cargamentos de carbón por convoyes de Feve, con cargadero en Ebhisa.
En el caso de optar por instalar una grúa automóvil como apoyo mientras se repara el pórtico, la misma se podría usar sólamente en la descarga de los graneleros de tamaño medio, al no tener el suficiente alcance para descargar las bodegas de los barcos con mayores mangas.
Ebhisa ha solicitado presupuestos para la reparación del pórtico dañado a Duro Felguera y al grupo TSK. Duro Felguera construyó en 2001 el tercer pórtico, mientras que una filial de TSK fue la que hizo en 1990 los otros dos, incluyendo el ahora dañado.
