Empieza la negociación. Los empleados y la dirección de Gijón Fabril iniciarán hoy las reuniones con las que el dueño de la planta pretende llegar a un acuerdo para el cierre de la fábrica de Porceyo. El administrador concursal nombrado por el juzgado de lo mercantil número 3 de la ciudad, el abogado ovetense Fermín Landeta Dosal, visitó ayer a los empleados de la factoría que permanecen encerrados dentro de las instalaciones para protestar contra la decisión de la dirección de clausurar la fábrica.

Los trabajadores afrontan la negociación viendo "lejano" el posible acuerdo. "No creemos que vayamos a poder acercar posturas porque de mano ya nos oponemos al cierre", señaló ayer uno de los portavoces de los empleados en conflicto. La empresa solicitó hace días el concurso voluntario de acreedores. El dueño de la factoría argumentó que no podía competir con las fábricas chinas. Los trabajadores, en cambio, aseguran que el empresario en realidad quiere desviar producción a otras de sus fábricas, ubicadas en Cataluña.

Los gijoneses que luchan por mantener su empleo han recibido en los últimos días el apoyo de diferentes grupos políticos e incluso de los compañeros de Tenneco, la planta gijonesa que anunció su cierre en 2013 y cuya clausura pudieron parar finalmente los empleados.