La plantilla del Club Hípico Astur (Chas) no entra a valorar en profundidad la oferta ideada por el Club Natación Santa Olaya para hacerse con la entidad, inmersa en una situación concursal. Sin embargo, los trabajadores sí señalan que "en principio cualquier solución que sea que el club continúe, y su actividad siga y los empleados sigan contando, es buena. Nos da lo mismo trabajar llamándose Chas u otra cosa". Y, en principio, la oferta del Santa Olaya garantizaría todo ello, según afirmó el presidente del club de la zona oeste, Secundino González.

La entidad olayista ha transmitido su intención de hacerse con el Chas a la administración concursal, a la junta gestora, y a los socios, con un documento dejado en el registro del club hípico. Sin embargo, en el mismo no se explicitan muchos detalles. Todo apunta a que, llegado el momento, el Santa Olaya presentará formalmente su oferta.

El Chas vive una situación de parálisis e incertidumbre. Después de que un grupo de socios impugnase, con éxito, la petición de liquidación formulada por la junta gestora, está a la espera de que se resuelvan otros frentes judiciales abiertos. Entretanto, los trabajadores han vuelto a sufrir impagos y el club les adeuda las nóminas de tres meses y dos pagas extras. Y eso que se han puesto varias soluciones sobre la mesa, como las ofertas de Ganax y el Grupo Covadonga. Ahora el Santa Olaya abre una tercera vía.

El club de natación sigue buscando dar transparencia a su movimiento, consensuado por la junta directiva y en el que han calculado "al milímetro" todos los números. Sin embargo, el montante continúa siendo un secreto. Secundino González, que ayer transmitió la intención de su directiva al concejal de Deportes, Jesús Martínez Salvador, quiere ampliar las fronteras del club con este proyecto en el que, en caso de ser aceptado por sus socios, tiene en mente acometer varias obras para mejorar las instalaciones y acomodar distintas parcelas deportivas que se unirían a la hípica y tiro con arco. Desde la entidad gijonesa se espera una respuesta, aunque son conscientes de que los cauces legales pueden alargarse en el tiempo dada la situación del Chas.