"Las carreteras no están adaptadas para el uso de la moto". Así de rotundo se muestra Alfonso Herrero, presidente del club "Herrero's Motor". "Tal como están es muy difícil hacer un uso correcto de la moto sin que te vayas al suelo o seccionarte alguna parte del cuerpo", alerta Herrero. Una opinión unánime ante la inoperancia de las autoridades que continúan sin solucionar el problema con los guardarraíles que siegan, literal y figuradamente, las vidas de muchos motoristas. La última en Asturias llegó el sábado con la muerte del gijonés José Manuel Peón en Carreño.

Los representantes de las peñas y asociaciones motoristas insisten en su denuncia y además plantean soluciones. "Hay formas de adaptación. Por ejemplo, poner una banda metálica en la parte de abajo o bien protegiendo el poste, que es más barato. En todos los países hay un montón de kilómetros de doble 'bionda', la de arriba es más rígida y la de abajo más elástica que absorbe más el golpe", apunta el motorista asturiano Roberto Naveiras que dirige el foro "Viajo en moto".

"Es un problema que tenemos pendiente. A ver si el Gobierno se implica de una vez y conseguimos que lo solucionen porque son auténticas guillotinas para las motos", reclama Juan Quintana, uno de los fundadores del Moto Club Astures, que en el mes de noviembre perdía en un accidente a su presidente Alberto Villar Peña.

La coincidencia de accidentes de tráfico y de demandas ciudadanas de mejora de la seguridad vial han llevado al grupo municipal del PP a exigir del gobierno local un informe sobre la siniestralidad en Gijón, durante los años de vigencia del Plan Municipal de Seguridad Vial 2011-2015. El PP quiere datos sobre la tipología de los accidentes, las características de las víctimas, la clase de vehículos implicados y la localización geográfica de los incidentes.