Más de 350 niños y niñas participaron ayer una fiesta solidaria de Carnaval que por segundo año consecutivo organizó el Colegio de la Inmaculada, a través de sus Campamentos de Verano en Saldaña. Todos disfrazados con el objetivo de recoger alimentos para la parroquia, a través de Cáritas, y para la Fundación Hogar de San José. Dos kilos de comida daban acceso a todas las actividades programadas por el equipo de monitores. Al final se llegó a una recaudación de 900 kilos.
La fiesta comenzó a las cinco de la tarde y concluyó cuatro horas después. En ese tiempo, todos los niños, desde los tres hasta los trece años, disfrutaron de los juegos y la animación de sus tradicionales campamentos de verano pero ataviados con disfraces. La Guerra de las galaxias, Hulk o las Tortugas Ninja fueron algunos de los superhéroes elegidos. Participaron en grupos, formados por ellos mismos, para recorrer todos los puntos del centro donde se repartieron las actividades. En esta ocasión, aprovechando el Antroxu, todos los monitores se disfrazaron de personajes de películas de animación.
"Ha sido todo un éxito. Sobre todo por la gran acogida que ha tenido, no solo en familias de nuestro centro, sino de muchos otros colegios de la ciudad y también de Oviedo y Avilés. Estamos muy agradecidos", señalaron los organizadores.
