Después de un multitudinario desfile de Antroxu en una noche -la del lunes- de temperatura casi tropical, la última jornada carnavalera tuvo que suspender algunos actos y acelerar otros por la lluvia y el viento. El cielo lloró la muerte de Gondolina antes de tiempo. Tanto que la defunción de la sardina, de origen veneciano, se precipitó y no se produjo en público, como es habitual. Además, su cadáver no pudo ser escoltado por charangas y plañideras en el cortejo fúnebre hasta la plaza del Marqués, donde se solía hacer la lectura de su testamento. Éste se hizo público antes de lo previsto en Begoña, con el cuerpo presente de la sardina y tras la entrega de premios de esta edición del Antroxu.

El temporal alteró tanto la última jornada carnavalera que se desconocen las circunstancias exactas de la muerte de Gondolina, aunque existen rumores que apuntan a que un infarto puso fin a su vida cuando se relajaba con un baño turco en Talasoponiente después de los excesos de la noche antroxera. Pero en Carnaval hasta los rumores pueden llevar máscara y es cuestión del lector si creerlos o no.

Lo que se conoce con total seguridad es el legado dejado por Gondolina en un testamento escrito en verso satírico. No se olvidó de su chófer Alfredo; de Agustín, presentador del concurso de charangas; y de los oricios que protagonizaron el pregón del Antroxu. Pero, sobre todo, se acordó de los gijoneses, a quienes dejó su apartamento en Venecia "para ir en metrotrén".

Precisamente, el plan de vías estuvo presente en el siempre reivindicativo testamento de la sardina. "Si me reencarno en bonito, chicharrín o tiburón volveré a esta villa hermosa en barco, en tren o en avión y espero no marearme entre tanta confusión porque cambiáis a diario el sitiu de la estación. La estación intermodal, metrotrén y tunelón... A ver si cuando yo vuelva está aclarado el follón", dejó escrito Gondolina, que también hizo mención al problema de la polución: "Y aunque respiro por branquias entre mareas y cachones, quiero un Xixón de aire limpio aunque circulen camiones. Ni fugas, ni humos, ni nubes, ni mierda suelta a montones; y que el indio de Ensidesa no nos toque los? pulmones".

No se olvidó de la lacra del paro y reclamó un acuerdo de gobierno a nivel nacional. "Señores Sánchez, Rivera, Iglesias, Rajoy... Pacten algo de una vez que ya va siendo pa hoy. Porque este país necesita alguien que diga: me voy; y que luego salga otro para decir: aquí estoy. Ya estamos acostumbrados a que éstos no lo borden, a que los líos aumenten y los follones engorden; pero si ellos no lo hacen a tiempo y con mucho orden, aquí mandará cualquiera: lo mismo Bertín Osborne", manifestó la sardina.

Y, además de otros asuntos, Gondolina incluyó la obligada referencia al Sporting. Sin perder tono reivindicativo, dado que pidió un cambio en la presidencia del club, antes de legar a la afición rojiblanca "una góndola molona para que sigan remando todos los de la Mareona".

El final de la lectura del testamento puso el broche, de forma precipitada por la lluvia, al Antroxu, con la canción "Vivir es un carnaval" de fondo y ante la mirada los más fieles al Antroxu gijonés, que, paraguas en mano, desafiaron al mal tiempo en la última jornada festiva.