San Valentín ha fichado en Gijón a una celestina muy singular: la biblioteca municipal de Vega-La Camocha. Los bibliotecarios de este centro se dedican estos días a buscar parejas que tengan muchas cosas que decirse al oído y ganas de aprender el uno del otro. La biblioteca será el lugar de la cita para quienes quieran protagonizar "historias de amor" en todos los idiomas. Y es que lo que busca la biblioteca gijonesa son dúos lingüísticos que estrenen su programa "¿Te buscamos pareja... para conversar en otros idiomas?". La actividad está diseñada y organizada. Sólo faltan algunos valientes que quieran apuntarse a este experiencia piloto de la Red Municipal de Bibliotecas de Gijón.

La idea del equipo de la biblioteca de Vega-La Camocha es "apoyar a la gente en el aprendizaje de otras lenguas, tan necesario en nuestros días, pero yendo más allá de los grupos de conversación de idiomas que ya existen". Quienes estén interesados en participar tienen que hacer una preinscripción a través de los cajeros ciudadanos, internet o la aplicación IGijón. La biblioteca se pondrá luego en contacto con ellos vía teléfono o correo electrónico para concretar la operación. Esta propuesta es gratuita para todos los participantes. Al igual que el resto de acciones del programa "Idiomas en compañía" al que pertenece esta agencia de búsqueda de parejas.

La exigencia de partida es que el candidato a encontrar pareja tenga un nivel básico en el idioma que quiere mejorar y conocer suficientemente el idioma que desea ofertar. La biblioteca emparejará a las dos personas más compatibles en sus intereses y el proyecto empezará en cuanto lleguen a un acuerdo. La oferta de idiomas dependerá de los conocimientos que puedan aportar los propios participantes. No hay límites. Y tampoco exigencia de que los maestros sean nativos. "Nuestro objetivo es llegar a públicos minoritarios con intereses lingüísticos menos frecuentes que aprender inglés alemán o francés, que también están incluidos, y aunarlos con la necesidad de aprender castellano que tiene la población extranjera no hispanohablante de nuestra ciudad", explican sus impulsores.

La idea es que la duración mínima de la relación sea de diez semanas pero no hay limites al amor... por estudiar otro idioma. El proceso de inscripción al proyecto estará abierto a lo largo de todo el año. Si la experiencia de Vega-La Camocha sale adelante con éxito el programa podría extenderse a otras bibliotecas.

Tal y como está planteada la actividad los encuentros para cada pareja serían en la propia biblioteca, una vez a la semana y de una hora y media de duración para poder dedicar cuarenta minutos a cada idioma. Los bibliotecarios ofrecerán a cada pareja de mutuos profesores consejos sobre cómo estructurar las sesiones de trabajo, y materiales audiovisuales y bibliográficos de apoyo . ¿Quién se apunta?