Estados Unidos y la Unión Europea negocian desde hace dos años y medio un gran acuerdo para sellar el Tratado de Libre Comercio e Inversión entre Europa y Estados Unidos (TTIP). Un proyecto que según los estudios disponibles beneficiará tanto a España como al resto de países miembros, en especial a la pequeña y media empresa (Pymes). Un acuerdo que impulsará el crecimiento y aumentará la calidad de vida en España, así como incrementará los intercambios comerciales y estrechará el lazo transatlántico, según las previsiones. Un tema del que se ha hecho eco la Cámara de Comercio de Gijón, que ayer organizó una jornada para profundizar sobre el tratado con el mayor experto en España sobre la materia, Jochen Müller, analista político de la Dirección de Relaciones Institucionales de la Representación en España de la Comisión Europea.
-¿Qué papel juega España en el TTIP?
-Al principio de las negociaciones todos los estados miembros han dado un mandato a la Comisión Europea para que negocie. Ese mandato es un texto que nos dice los objetivos que queremos hacer y lo que no queremos hacer, es decir, establece las líneas rojas. España está dentro de los 28 países miembros que ha negociado este mandato. Además, participa a través del Consejo en las negociaciones. Y con influencia. El tercer punto son los eurodiputados españoles, elegidos en el Parlamento Europeo, son ellos los que tienen que aprobar el acuerdo final e influir en él. También el parlamento nacional, porque probablemente va a tener que ser ratificado en los 28 parlamentos nacionales.
-¿La ausencia de Gobierno en España puede suponer un lastre?
No. La competencia negociadora es exclusivamente de la Comisión Europea. Ahora seguimos negociando e informando al Gobierno, la administración y a la sociedad civil. Es importante que al final del proceso se ratifique el acuerdo pero eso será mucho más adelante. Ahora estamos más o menos al 60% de las negociaciones. Falta debatir temas muy técnicos y la esperanza es cerrar el acuerdo con la administración Obama.
-Al margen de la UE, Estados Unidos es el país al que más exporta España. ¿Qué buscan en este país?
-Principalmente automóvil. España es el segundo exportador en Europa de automóvil, sólo por detrás de Alemania. También química, farmacéutica y agroalimentación como aceite de oliva, cítricos, pescado como el atún, y hortalizas y fruta, sobretodo. Agroalimentación con valor añadido, es decir, procesado. Luego maquinaria, bienes de equipo, sobre todo de Asturias. Eso es lo principal.
-Si ya es al país que más se exporta, ¿qué beneficios traerá a España?
-Hay sectores industriales donde los aranceles son elevados. La media de aranceles entre Europa y Estados Unidos es cierto que está en el 4%, pero hay sectores importantes, como el calzado que llega al 30%, la cerámica al 18%, o en algunos productos frescos incluso llega al cien por cien. Demuestra que en muchos sectores hay aranceles importantes y los queremos reducir a cero. Otro problema es la licitación pública porque el mercado americano está cerrado prácticamente a todas las empresas que no tienen sedes allí. Hay algunas que lo tienen resuelto pero las Pymes quieren participar y es un mercado cerrado. Sucede en Asturias con Samoa, dedicada a la fabricación de equipamiento para lubricación y sistemas de bombeo, o Rioglass, de placas solares, que tienen mucho interés en participar en licitaciones públicas. Luego está el ámbito de las trabas administrativas y de aduanas, evitar dobles inspecciones, armonizar etiquetaje, certificaciones, etcétera. Todo eso supone costes que pagan las empresas. Para una multinacional son costes pequeños, y una vez más son las Pymes quienes más difícil lo tienen pagar porque para ellos supone una barrera que no pueden pasar.
-¿Supondrá un punto de inflexión para las Pymes?
-Exactamente. Este tratado tiene un capítulo especial para Pymes para que les orientemos sobre cuáles son los procedimientos y reglas a seguir. En España solo hay 90.000 empresas que exportan, es muy poco, comparado con otros países. Debemos aumentar esa base exportadora. Y los que ya lo hacen son pequeños y hay que ayudarles a que crezcan. El TTIP ayudará a crecer en el mercado americano, el más dinámico del mundo, vender más y crear empleo en España.
-¿Cuánto empleo?
-Hay estudios de impacto que apuntan en la dirección del crecimiento de empleo y del PIB. El más reciente lo realizó la Universidad Complutense de Madrid con un equipo independiente de investigación. Sostienen que, en el caso de llegar a un acuerdo ambicioso, en los primeros cinco años habrá un crecimiento del 3% del PIB nacional y se crearán 330.00 nuevos empleos netos adicionales. Eso los sustenta el comercio entre EE UU y España que aumentaría el volumen un 30%. Y también los salarios medios españoles crecerán un 0.7% anual porque muestra la evidencia que puestos de trabajo ligados a exportación requiere mayor cualificación y, en consecuencia, una mejor remuneración.
-Estados Unidos es el principal inversor en España. ¿Garantiza que España tenga un peso importante?
-Exactamente. Estados Unidos tiene alrededor de 1.300 empresas en España que dan empleo a más de 150.00 personas. Eso tiene una importancia tremenda. Con la exportación de España a EE UU se incrementarán otros 300.000 empleos. Esos vínculos comerciales y de inversión hacen que España tenga un peso fuerte en el tratado.
