"Las medidas provisionales al final duran 30 años". Este es el temor de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del IES Roces y por el que se oponen a los módulos prefrabricados como solución a la necesidad de ampliación de las instalaciones, "debido al impacto negativo que va a suponer a las familias que actualmente son usuarias del centro y a aquellas que en breve lo serán", denuncia la asociación que el viernes se reunió en asamblea para analizar la situación y buscar soluciones.

"Nuestra intención es reunirnos con la Consejería de Educación para que reconsideren su postura e intentar llegar a un acuerdo beneficioso para todos", explica María José Arboleya, presidenta de la AMPA del IES Roces. "Se ha empleado mucho tiempo en conseguir lo que tenemos, eliminar las etiquetas que tenía. No queremos desprendernos de esa labor y que nuestros alumnos tengan que renunciar a ciclos formativos ni que ir a un colegio concertado", recalca Arboleya.

Para lograr su objetivo mantienen contacto continuo con la dirección del centro: "Nos transmiten la información que va llegando. Estamos al tanto". Además avanzan en sus comunicaciones con profesores, alumnos, movimientos sociales y otras asociaciones de padres y madres, como la AMPA del cercanos CP Alfonso Camín, para aunar esfuerzos y lograr que se retome la ampliación prevista en su día y adecuarla a las necesidades actuales. "La prevista, aprobada en 2014, iba a quedar pequeña para las necesidades de la zona", sostienen los padres. Además, desde la AMPA impulsarán la recogida de firmas para presionar al Principado y que retome el proyecto de ampliación con unas instalaciones de garantía.

Apoyo político

Para cumplir sus objetivos cuentan con el apoyo de algunos grupos municipales. El grupo municipal de Izquierda Unida solicitó al gobierno local de Foro que se pronuncie sobre la problemática que sufren los alumnos del centro de Roces y medie con la consejería de Educación. La petición, formalizada por la edil Ana Castaño, espera que el equipo de Foro rechace los barracones del IES Roces y medie con el Principado para alcanzar una solución que satisfaga a las familias de los estudiantes. "Dudamos de que esta decisión se hubiera tomado si el instituto en vez de en Roces estuviera en la zona centro o en otro barrio de la ciudad", recriminó Castaño, que defendió que "la falta de espacio allí no es coyuntural, y por lo tanto la instalación de estructuras provisionales no es la solución. Rechazamos el modelo de la Comunidad Valenciana".

En la misma línea, Ana Castaño registró el viernes una pregunta ante la Comisión de Bienestar Social, Cooperación, Cultura y Educación, que se celebrará el próximo lunes, con el objetivo de conocer si desde el Ayuntamiento se ha realizado alguna gestión o adoptado alguna medida en relación asunto.