Las mujeres trabajan casi medio año gratis. Es la conclusión que ayer expuso Fernando Díaz, de UGT Gijón, en la celebración del Día Internacional de la Igualdad Salarial y tras hacer el cómputo de los "88 días que las mujeres tienen que trabajar más que los hombres para ganar lo mismo y los 91 días más no remunerados que trabajan en el hogar". Un triste retrato que se repite cada año y que, es más, "va a peor".

María Pazos Morán, experta en análisis de políticas económicas para avanzar en igualdad de género, licenciada en Matemáticas y jefa de estudios del Instituto de Estudios Fiscales del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas fue la encargada de denunciar ayer en el acto organizado por el Ayuntamiento "una lacra que no es solo de este país, sino mundial, a pesar de que las mujeres están más preparadas, sacan mejores resultados académicos, y finalmente trabajan más horas en total".

Las consecuencias de esta desigualdad salarial se traducen en "menores pensiones, menores derechos y mayor pobreza económica" en una sociedad cuya estructura está determinada por la división sexual del trabajo, defendió la ponente, dado que "las mujeres tenemos que especializarnos más en los trabajos de cuidado mientras que los hombres están ajenos a este ámbito, son los sustentadores que llevan dinero a casa mientras que las mujeres aún se siguen viendo en la pobreza y la dependencia, sin tener posibilidad de decidir sobre su propia vida".

Pese a lo negativo del panorama, las soluciones "son posibles", siempre que se actúe, alertó María Pazos, sobre el sistema de cuidados. Porque, por mucho que los hombres deseen practicar la igualdad en cuestiones como el cuidado de los hijos lo cierto es que "no tienen los derechos ni tan siquiera de la Seguridad Social para ello, puesto que solo dispone de quince días de permiso mientras que a la mujer le dan 16 semanas". Es por ello "cosa absurda que les digan a los hombres que tienen que cuidar igual pero luego no les den la oportunidad", despreciando con ello la oportunidad de establecer la igualdad de roles de género en la pareja. "Cuando hay alguien a quien cuidar, son las mujeres las que se descuelgan del empleo y los hombres se acostumbran a estar ausentes" lamentó la ponente.

Pazos reclamó además a universalización de la educación infantil a partir de los cero años, 35 horas semanales de jornada máxima a tiempo completo o la universalización de los servicios públicos de atención a la dependencia para que "las mujeres puedan estar en el empleo de calidad sin tener que renunciar a ser madres y puedan ser madres sin tener que renunciar al empleo de calidad".

Todo ello revertirá "como demuestra la experiencia internacional" en que "cuando se toman las medidas adecuadas los hombres se inician en los cuidados, están satisfechos con ese papel y se avanza a todos los niveles en la sociedad. Tal y como indicó María Pazos en su ponencia, "se demuestra que las parejas que comparten los cuidados tienen muchísima menos incidencia de violencia de género".