El número de alumnos que hacen prácticas en las empresas en Asturias no ha dejado de crecer en los últimos años, en un esfuerzo por acercar cada vez más la Universidad al mundo laboral y viceversa. Por eso el XV Foro de Empleo de la Universidad de Oviedo abrió ayer sus puertas centrado en ofrecer a los jóvenes recién titulados todas las herramientas posibles para mejorar su empleabilidad.

Con cerca de un centenar de empresas e instituciones, la Feria de Muestras ofrece desde ayer y a lo largo de toda la jornada de hoy la posibilidad la informarse y formarse a la caza de la mejor oportunidad de futuro, teniendo en cuenta que "es fundamental ayudar a los aspirantes a que se vendan, a que aprendan a dirigirse a las empresas de manera breve y concisa para despertar en ellas un interés", apunta Lydia Alonso, responsable de innovación organizativa del Centro Europeo de Empresas e Innovación en Asturias.

Por eso el CEEI organiza varios talleres formativos en los que "damos las claves para hacer un buen "elevator pitch", cómo ser concisos para tratar de reflejar en 90 segundos lo mejor de los currículos, no sólo desde el punto de vista de las aptitudes y habilidades, también de actitudes y competencias que tiene cada candidato", señala Alonso. La segunda parte del taller consiste en la aplicación de estas habilidades ante varias empresas que buscan perfiles determinados, y de cundir el ejemplo del año pasado, "es fácil que alguno de los alumnos acabe incorporado a las compañías".

Es la filosofía de una feria que supone un buen escaparate para aquellos que buscan una primera oportunidad. Sobre todo porque "así nos enteramos de cosas que no sabíamos, como que muchas empresas de ingeniería están pidiendo el francés por encima del alemán que tanto nos inculcaban, porque están desarrollando muchos proyectos en África", señalaba ayer el ovetense Juan Álvarez, estudiante de Ingeniería Mecánica que acudía por primera vez al foro. Junto con Iria Ayarza, alumna de último curso de Ingeniería Electrónica, lo que más les interesa es "el tema de las becas, porque lo de conseguir un empleo está más complicado". Por eso acudieron cargados con sus currículos con la esperanza de "que alguna empresa se interese" en la búsqueda de una primera oportunidad laboral. Al igual que ellos Adriana Tijero, Aitor Delgado y Ander Cervero recorrieron los stands más próximos a su área de formación, la topografía, dispuestos a dar con un hueco. "Será difícil y estamos dispuestos a salir fuera, de lo nuestro no hay mucha oferta", lamentaban.

La Universidad y las empresas tendrán que enfrentarse en lo sucesivo a algunas cuestiones como el reparto de competencias a la hora de formar a los estudiantes para la búsqueda de empleo, un asunto que, como indicó el rector de la Universidad de La Rioja, José Arnáez, en la conferencia inaugural, "suscita muchas dudas y debates para el futuro".

Arnáez puso sobre la mesa algunas cuestiones como el convencimiento de los recién titulados de que existen carencias formativas en idiomas, formación práctica, habilidades directivas, gestión de la presión o toma decisiones en entornos internacionales a la hora de desarrollar su labor en las empresas. Un reto de futuro en el que, no obstante, "el empleo es responsabilidad de las empresas, y no de la Universidad", puntualizó el rector de La Rioja.

En el acto de inauguración de ayer también hubo espacio para homenajear a las empresas que cada año colaboran en el foro, una de las principales novedades de una edición que también servirá de marco para resolver una original iniciativa: el taller "Tu valor es innovar", en el que ocho equipos de estudiantes se han esforzado para responder a los retos que les han planteado media docena de empresas en busca de soluciones originales para problemas reales.

Esta tarde se dará a conocer el equipo ganador en cada uno de los retos, un ejemplo de que la semilla empresarial, bien abonada, ya puede prender desde el aula.