El Musel unificará las dos concesiones existentes en terrenos portuarios para limitar el trasvase de carbón en camiones de una a otra, mediante el asfaltado de 300.000 metros cuadrados. Se trata de un proyecto "mucho más ambicioso", según fuentes portuarias, que el anunciado apantallamiento de la zona de Aboño, que estará listo en medio año, para limitar los efectos de las nubes de polvo que se han sucedido s durante los últimos meses a cauda de condiciones meteorológicas adversas y que el viento ha llevado desde el puerto a la ciudad.

También se van a colocar nuevos cañones de riego con mayor potencia y sistemas más modernos. El proyecto, cuya cuantía aún se desconoce, estará presupuestado este mes.

"El Musel es una instalación industrial y de servicios cuya operativa está sujeta a las más estrictas normas, si bien ello no impide que, en circunstancias muy excepcionales, puedan originarse indeseadas molestias, siempre limitadas y cuya corrección es objeto de atención permanente", señalaron desde el puerto, aunque reconocen que no pueden comprometerse "a que no se repetirán tales molestias, pero sí a poner todos los medios a su alcance para minimizar los efectos en un puerto que acumula a diario un millón y medio de toneladas de carbón, una cantidad superior a la suma de todas las minas a cielo abierto del país".

Por otra parte, la naviera danesa Nordana Line, que ofrece servicio entre el Mediterráneo y América, hizo escala en febrero por primera vez en el puerto de El Musel, con su buque ro-ro multipropósito 'Wilhelmsborg', equipado con grúa y una rampa de 176 toneladas de capacidad, que embarcó carga general con destino a Centroamérica, Caribe y Estados Unidos, con Marítima del Principado como estibador.