La Guardia Civil ha detenido a ocho personas en varias ciudades españolas -una de ellas en Gijón-, acusadas de distribuir pornografía infantil a través de internet. La Benemérita llevó a cabo esta operación policial contra la pedofilia en la red gracias a la colaboración de la Europol. Los agentes aseguran que las imágenes que se intercambiaban los ahora detenidos eran de "extrema dureza" y en ellas se veía explícitamente "actividad sexual con penetración, con animales y sadismo".

Los funcionarios encargados de este caso registraron la casa del gijonés detenido. En total en esta operación se intervinieron ocho ordenadores, 20 discos duros externos y varios soportes ópticos. Los portavoces de la Benemérita definieron ayer la investigación como "muy compleja" debido, entre otras cosas, a que los autores de estos delitos utilizaban una red denominada "Tor", en la que se usan "varias capas de cifrado". "El navegador no lleva directamente al sitio web deseado, sino que hace al usuario pasar por diversas máquinas intermedias dentro de la propia red. Así, cada máquina cifra la comunicación y da una dirección IP diferente, lo que es vital para el anonimato de los internautas", explicaron ayer desde el instituto armado. Gracias a esta red "Tor" los pedófilos logran "que sea imposible saber quién hay detrás de cada conexión a una web oscura".

La investigación no está aún cerrada. Los agentes de la Guardia Civil están analizando actualmente el material intervenido "para determinar la posible existencia de un delito de producción de material pedófilo y determinar la identidad de las víctimas así como las conexiones con otros usuarios".