Al igual que un barco intenta mantenerse a flote durante una tempestad, la zona sur de Gijón necesita ayudas, apoyos e implicación de todos los agentes sociales y de los vecinos en general. Sus recursos educativos se hunden en lo que en la última década ha sido una falta absoluta de análisis de las necesidades causadas por un incremento de su población en más de diez mil habitantes.

Hace ya más de cuatro años que la Consejería reconoció ante las asociaciones de padres y madres y las directivas de los centros IES Roces y CP Alfonso Camín (barrio de Roces en Gijón) la necesidad de ampliar ambos centros educativos. Hoy sólo tenemos tres aulas nuevas de Infantil y proyectos de ampliación presupuestados y aprobados pero bloqueados por una prórroga presupuestaria y compromisos que se dilatan en el tiempo.

Unos pocos empezaron a pelear hace tiempo por lo que se preveía un problema de difícil solución. Hoy, ante la urgencia de la situación, ya son otros movimientos, asociaciones y partidos políticos los que aportan su grano de arena y ayudan a unir fuerzas para lograr lo que para algunos parece ser un antojo pero que no es más que un derecho que nos asegura la Constitución española en su título 1 artículo 27.5:

"Los poderes públicos garantizan el derecho de todos a la educación, mediante una programación general de la enseñanza, con participación efectiva de todos los sectores afectados y la creación de centros docentes".

A menos de seis meses del comienzo de un nuevo curso en el que nuevamente se tendrán que tomar medidas para adaptar a la demanda de escolarización los espacios disponibles en los centros, es necesario que Gijón Sur se una en los actos reivindicativos que tendrán lugar en las próximas semanas.

Somos un barrio orgulloso de apoyar a nuestros vecinos cuando su puesto de trabajo está en juego. Hace años la unión de todos evitó el cierre del instituto y hoy nuestros centros educativos vuelven a necesitar de todos los vecinos para hacer ver a los responsables de esta situación que no vamos a permanecer más tiempo callados.

Una prórroga presupuestaria no es excusa para que nuestros hijos no tengan dónde matricularse el curso que viene. Exigimos un inicio inmediato de las obras de ampliación de nuestros centros educativos y que se tomen todas las medidas oportunas para que nuestros hijos dispongan de unos centros educativos dignos. Las medidas provisionales no deben dilatar más la ejecución de las soluciones finales necesarias.

¡No son sólo nuestros hijos, son los tuyos, tus hermanos, tus sobrinos y nietos!