Llegaron desde A Coruña a bordo del crucero noruego "MS Fram", el buque más moderno de la flota Hurtigruten, botado en 2007, con capacidad para 318 pasajeros. Atracaron puntuales, a las ocho de la mañana, en el Muelle de La Osa de El Musel con una estancia prevista en Gijón de diez horas, hasta las seis de la tarde.

Los visitantes, de nacionalidad inglesa (20%) y alemana (80%) aprovecharon la estancia para visitar Gijón y, también Oviedo. En este caso 177 viajeros -el crucero no venía lleno-, repartidos en cuatro autocares, se sumaron a las rutas que programa el operador turístico "Cesetur" y visitaron San Julián de los Prados, la Catedral y el casco antiguo ovetense durante cuatro horas. Después la expedición tomó rumbo nuevamente a Gijón para almorzar, en torno a las doce del mediodía -y a bordo-, y proseguir su visita por la tarde, ya en la capital marítima del Principado, hasta las seis de la tarde en que zarpó el barco con destino a Bilbao, su siguiente parada.

Estas visitas vienen, en su mayoría, con el viaje previamente diseñado para aprovechar la estancia en cada ciudad de paso. "Este es un crucero pequeño, pero siempre repercute en positivo porque se ha bajado todo el mundo del barco y el que no gasta en el café lo hace en compras. El impacto es de mucha gente en poco tiempo", señala Rubén Rodríguez, de "Cesetur".

La visita marítima del crucero noruego "MS Fram" es el primero de los 19 buques, confirmados por el momento, que hasta principios de noviembre traerán a bordo a Gijón 33.132 pasajeros. Una cifra que supone un incremento del 102% en el número de pasajeros y de un 46% en el de escalas respecto al año pasado.