La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los alumnos de 3 años sin plaza en el colegio elegido se reducen de 350 a 50 en un decenio

Las solicitudes para el primer curso de Infantil caen de las 2.050 peticiones en 2011 a las poco más de 1.700 este año

Un familiar consulta los plazos de escolarización en un tablón de anuncios de un colegio gijonés. MARCOS LEÓN

En el colegio Montevil, acostumbrados como están todos los años a baremar y dejar sin plaza a una veintena de alumnos, no recordaban cuándo tuvieron tan pocas solicitudes de ingreso escolar para el nivel de tres años: 62 peticiones siendo su centro uno de los grandes del concejo (con 69 puestos ofertados), y estando como está instalado en uno de los barrios de familias jóvenes. En Atalía, un centro singularizado en Gijón por su programa bilingüe respaldado por el British Council desde hace décadas, también estaban perplejos: "solíamos dejar fuera alumnos suficientes para llenar más de un aula y media, y este año nos sobran muy pocos", contaba el director Mikel de la Torre.

En la Escuela Infantil Gloria Fuertes, la directora, Yolanda Camello, se mostraba asustada por la deriva demográfica del barrio de El Llano: "el peor año de solicitudes, con diferencia; antes estaban las familias jóvenes y los inmigrantes, que necesitaban muchas plazas. Ahora no sé cuál será la perspectiva". En otra Escuela Infantil, la de Las Mestas, la mayor del concejo y donde se ofrecía el mayor número de puestos para niños de infantil, eran el viernes muy reacios a dar la cifra de solicitudes y, frente a su oferta de 92 puestos para 3 años sólo eran capaces de admitir que, a cierre del plazo de solicitudes, no se llegaba a las 60 peticiones.

En el colegio Laviada, el director Pedro Lanza, rumiaba su pesar por "una bajada enorme de peticiones de plaza, y eso que sé que este centro tiene un buen nombre entre la comunidad. Pero esta zona es de familias mayores y el horizonte va a ser complicado". Ni siquiera en el colegio Begoña, otro de los centros raramente sometido a vaivenes, hubo tranquilidad en el periodo de admisiones porque "se sabía que había bajada de natalidad y si a eso le juntas la cantidad de gente joven que se ha tenido que marchar fuera a trabajar el resultado es que se nota muchísimo la pérdida de alumnos", indicaba Jorge García, el director.

Los seis centros son ejemplos simbólicos de la preocupación que ha cundido en el sector educativo gijonés por la caída de alumnos de infantil, los que a la postre dan garantía de continuidad y estabilidad a los colegios. Seis centros, los citados, con proyectos consolidados, con tradicional "tirón" entre las familias, con espacios y entornos que les ayudan para ser centros siempre con alta demanda y todos ellos de barrios diferentes (Montevil, El Natahoyo, Viesques, El Llano, Laviada), lo que permite componer un mapa donde la caída de natalidad no entiende de puntos cardinales.

A falta de datos oficiales, ya que la consulta a los centros se hizo en la misma mañana de cierre del plazo oficial de presentación de solicitudes y hay margen de error, de los 35 colegios y escuelas infantiles públicas del concejo sólo cinco contaban con tener alumnos excedentes respecto a los puestos que ofertaban: Atalía, Martínez Torner, Honesto Batalón, Río Piles y Severo Ochoa. Y en total sumaban 24 alumnos sobrantes.

En la red concertada, con 13 centros, cuatro cerraron con sobrantes: Montedeva, Asunción, San Vicente y Virgen Reina (a falta de conocerse datos de Inmaculada, que también podría tener algún sobrante). Y no sumarían más de una treintena. Eso son, entre las dos redes, poco más de medio centenar de excedentes cuando hace sólo diez años los alumnos de tres años que quedaron sin plaza en el centro elegido por sus padres fueron 350 (347 en concreto, en 2006). En 2010 los excedentes reconocidos por la Consejería fueron 278.

Con respecto al dato global de alumnos de infantil de tres años, los datos iniciales apuntan a que se formalizaron en torno a 1.100 solicitudes de 3 años en la red pública, donde había 1.479 plazas; y se rondarán las 680 peticiones en la concertada, que tenía casi esas plazas. Eso suman unos 1.700-1.800 alumnos de nuevo ingreso: en 2010 la matrícula fue de cerca de 2.050 niños entre las dos redes: concertada y pública.

Compartir el artículo

stats