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JAVIER CÁMARA | Director ejecutivo de la red social de afinidad "beBee"

"No estar presente en las redes sociales es como no saber leer ni escribir"

"Hay gente joven que dice que está muy preparada y no es verdad; muchos se olvidan de que también hay que dar imagen"

Javier Cámara, ayer, en Gijón. MARCOS LEÓN

La Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), en colaboración con Eurofirms, celebró ayer en Gijón una jornada bajo el título "¿Convivencia o competencia. Séniors vs Millennials. La diversidad generacional de la empresa", con expertos en la materia. Allí tomó parte Javier Cámara (Miranda de Ebro, 1972), director ejecutivo de "beBee", una red social de afinidad. En esta plataforma, que aglutina ya diez millones y medio de usuarios, cuatro de ellos en España y que ya se está abriendo al mercado anglosajón en Estados Unidos, donde crecen cada día, se pone en contacto a usuarios, tanto en el plano personal como profesional, a través de grupos de ocio y profesionales que sus creadores denominan colmenas. Cada publicación se denomina "buzz", en honor al zumbido de las abejas, su logo. El reto ahora es alcanzar los 50 millones de usuarios en los próximos dos años.

-¿Qué hace diferente a beBee de otras plataformas?

-Es una red social de afinidad en la que te relacionas y conectas únicamente con las personas y el contenido que te interesa. Por ejemplo, si te interesa el marketing y la moda haces networking con esas personas, con personas que no conoces pero con las que compartes las mismas aficiones, ya sean personales o profesionales. En la parte profesional puedes ofrecer tus servicios y tienes una parte de empleo en que las empresas pueden publicar sus ofertas de trabajo en las colmenas, que son grupos de afinidad. En la colmena de moda, por ejemplo, y ahí encuentra profesionales de ese sector luego es algo muy directo tanto ofrecer trabajo como encontrarlo.

-¿Quién tiene acceso?

-Es público y abierto cien por cien. Entras en beBee y ves a los diez millones de usuarios, puedes acceder a las colmenas y en el perfil de cada usuario, pero para contactar debes seguir y que te sigan en la red. En cambio las empresas de reclutamiento tienen acceso a la gente que busca empleo y da su consentimiento para que la puedan llamar. Un usuario normal no puede acceder a los datos privados como el mail o el teléfono sin que el otro se los facilite.

-En poco más de un año han superado los diez millones de usuarios. ¿Les ha venido bien el paro en España?

-Eso ayuda porque se necesita trabajar para comer y para vivir pero no es solo cosa de España, es algo general porque el mundo está muy turbulento, sucede también en Colombia, en México? a distinta escala seguramente, pero sucede. Los proyectos en internet que llegan a ser muy grandes satisfacen una necesidad. Una de ellas, en primer grado, es que se necesita trabajar para comer, otra es que necesitamos socializar y conocer personas.

-Estas plataformas sustituyen el ir llamando de puerta en puerta buscando trabajo. ¿Esto no incita a la vagancia esperando sentado a que te llamen?

-Observo que es tan complicado encontrar trabajo o mejorarlo que no vale con dejar ahí tu curriculo o lo que hace la gente como registrarse en Linkedin, eso no sirve. Lo que intentamos en beBee es que el usuario se haga visible, interactúe con personas afines a él que le puedan ofrecer esas oportunidades laborales. Si no lo hace, difícilmente encontrará trabajo. El currículo 2.0 es crearte la cuenta pero nada más, debes seguir llamando a las puertas que, en beBee, es dirigirte a colmenas y sectores profesionales que te interesan y mostrar interés por trabajar con ellos. No basta con estar ahí, hay que seguir llamando a las puertas igual o más que antes.

-La jornada versa sobre "Millennials" y séniors en las empresas. ¿También tienen esa dualidad en beBee?

-No veo tanto esa dualidad. Soy de la "Generación X" -nacidos entre 1967 y 1976- y me he ido adaptando a la "Generación Y" (o "Millennials") -entre 1977 y 1994- y me adaptaré a la siguiente. Antes me parecía impensable meterme en Twitter pero pienso que es un deber estar al día. Si no te comunicas te quedas fuera del mercado. En el sentido laboral si no estás preparado te vas a quedar fuera, es mejor no dudarlo, estate por si acaso. Pero respondiéndote, en beBee, sí hacen diferentes actividades según la generación pero interactúan.

-Siempre han confluido varias generaciones en las empresas. ¿Por qué preocupa esto ahora?

-La forma de consumir información ha cambiado mucho. Ahora, salvando las distancias, quien no está presente en redes sociales es como no saber leer ni escribir. Saber idiomas ya no es un valor añadido y estar al día en nuevas tecnologías es como saber idiomas, ya no te diferencia, se presupone. Pero hay mucha gente que se está quedando atrás, se está produciendo un escalón peligroso. Hay gente que no se está incorporando y eso es un problema porque si no dominas el medio te quedas fuera. Las empresas buscamos gente que si no lo llevan en activo lo hayan asumido.

-¿Es mejor esta nueva generación que las anteriores?

-En absoluto estoy de acuerdo- No creo que esta nueva generación tenga unos valores mejores que nosotros. Ellos buscan lo mismo que nosotros entonces, pero ellos sí valoran, inicialmente, sentirse bien, ser importantes, eso lo buscan antes que el dinero pero el objetivo final es el mismo porque somos personas, ambiciosos y queremos estar mejor. Además hay muchos mitos, hay gente joven que dice que está muy preparada y no es verdad, muchos se olvidan que también hay que dar una imagen. Y los hay que son capaces y su sector está mal y tienen que reiventarse. Hay muchas casuísticas distintas.

-¿Los séniors son capaces de aprender de un joven? ¿Hay intención de hacerlo?

-Hay gente que se siente infravalorada en ese aspecto. Los jóvenes tienen que aprender de los séniors y viceversa. Lo mejor es tener actitud positiva, ser humilde, y aunque lleves veinte años haciendo las cosas de una manera puedes aprender algo de la gente joven. La experiencia es un grado, dos y tres grados, no hay duda, pero a las empresas les da miedo contratar a séniors porque ya no son moldeables, y en muchos casos no se adaptan. Y sin adaptarte no vas a conseguir trabajo ni en esta vida ni en la siguiente. En los séniors se detecta la falta de apertura, creen que lo saben todo y hay una brecha a partir de los 40 años que tienen más dificultades de ese tipo pero lo importante es ser versátil y reinventarte. Pero lo fundamental es la actitud.

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