Una solitaria pancarta recordando desde el balcón de la Casa Consistorial las tres décadas de pertenencia de España a la Unión Europea compartió a mediodía de ayer la plaza Mayor con una protesta contra el tratado firmado con Turquía "para la deportación de la población refugiada: el tratado de la vergüenzas" organizada por la Coordinadora de ONGD del Principado de Asturias (Codopa). Dos miradas a Europa que coincidieron en la "celebración" del 9 de mayo como día dedicado a la exaltación de los valores europeístas. Celeste Intriago, presidenta de Codopa, aprovechó su paso por Gijón para, flanqueada por los ediles Mario Suárez (XSP) y Ana Castaño (IU), promocionar la moción presentada por su organización a los ayuntamientos asturianos en defensa de los derechos de las personas refugiadas. Un texto que no pudo incorporarse al Pleno como declaración institucional al no contar con el apoyo del PP. Precisamente el líder popular, Mariano Marín, reivindicaba minutos después en el mismo espacio el orgullo de ser europeo.