Todo se remonta a hace 22 años, cuando unos terrenos en La Guía, que en la actualidad ocupan el parque que lleva el nombre de Alejo Caso, un supermercado y viviendas unifamiliares, fueron expropiados forzosamente a Jaime Cifuentes Zarracina y sus hermanos Dionisio y Filomena por el Ayuntamiento de Gijón. Los afectados reclamaron ante la Justicia su disconformidad con el precio de la expropiación, y en los tribunales se les fue dando la razón hasta acumular, según los afectados, sentencias favorables (incluso del Tribuna Supremo) por una cantidad cercana a los dos millones de euros -incluidos intereses de demora- que ahora reclaman al Consistorio gijonés. Por eso ayer, Jaime Cifuentes juntos a sus seis hijos, aprovechó el acto por el que se dio nombre al parque Alejo Caso en La Guía para recordar y exigir que se resuelva un conflicto que dura ya más de dos décadas.

"Ya no es solo un tema de justicia, sino también de justicia sanitaria y moral", explica Luis García, uno de los hijos de Jaime, que atraviesa por un delicado estado de salud. "Está en estado de prórroga ya según los pronósticos médicos por la enfermedad que sufre. Pedimos que todo se arregle y que pueda al menos llevarse esa alegría en sus últimos días de ver cómo se resuelve un conflicto por el que tanto ha luchado", añade.

Los familiares denuncian también la dejadez de los últimos gobiernos municipales en la gestión de "un dinero de todos los gijoneses al que se siguen generando intereses de demora cada día más grandes que el propio importe principal"; y denuncian que "hay una consigna de 300.000 euros para este pago pero sigue sin dar luz verde a ejecutar lo que dice la ley".