La Fiscalía de Área de Gijón solicita una pena individual de un año de prisión, así como el pago conjunto de indemnizaciones por casi 50.000 euros, para el administrador y la encargada de una panadería de Gijón en la que un obrador sufrió un accidente laboral que le ha dejado secuelas.

Los hechos ocurrieron sobre las 6:00 horas del 12 de julio de 2013, cuando el trabajador, que se encontraba controlando el proceso de amasado, se aproximó a los engranajes de los rodillos de la máquina formadora de pan y se le quedó el brazo izquierdo atrapado.

El trabajador sufrió lesiones de las que tardó en curar 173 días, diez de ellas de ingreso hospitalario, y que le dejaron varias cicatrices como secuela.

La Fiscalía advierte en su escrito de acusación que la máquina carecía de pletina protectora, ya que se había caído el día antes, y que el empleado, de 37 años y que llevaba un mes en la empresa, no había recibido formación para operar con la máquina que manejaba.

Además de la pena de prisión, el fiscal interesa que el administrador y la encargada de la panadería indemnicen de forma conjunta al trabajador con 10.580 euros por las lesiones y con 30.000 euros por las secuelas, y a Ibermutuamur con 8.974,06 euros por los gastos asistenciales. La vista oral está señalada a las 10:30 horas de mañana en el Juzgado de lo Penal número 1 de Gijón