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Descartan que un fallo eléctrico originase el incendio en el Club de Regatas

Las llamas provocaron daños valorados en más de 40.000 euros, según el informe elaborado por los peritos

Estado en el que quedó la sauna tras el incendio. LNE

El incendio que a finales del pasado mes de mayo calcinó por completo la sauna situada en las instalaciones del Club Astur de Regatas de Cimadevilla no se originó como consecuencia de un fallo eléctrico. Al menos esa es la primera conclusión que se extrae del informe elaborado por los técnicos que examinaron el lugar del suceso y que ya ha sido remitido al juzgado de instrucción que investiga los hechos por si de lo sucedido pudiera desprenderse algún tipo de responsabilidad.

Los hechos que ahora son objeto de investigación tuvieron lugar el 26 de mayo a primera hora de la tarde. El incendio de la sauna obligó por aquel entonces a desalojar por completo las instalaciones del Club de Regatas. A pesar de que el fuego se propagó por varias estancias no hubo que lamentar daños personales. Las llamas provocaron daños valorados en más de 40.000 euros, según los peritos. No en vano el incendio causó importantes desperfectos en la sauna y en un vestuario cercano. Ambos servicios siguen actualmente cerrados al público hasta que concluyan las obras de reconstrucción que tienen previsto emprender desde el Club de Regatas.

"Hubo que sacar a la gente del comedor y del resto de instalaciones porque había mucho humo pero nadie necesitó asistencia médica", señaló tras el suceso uno de los responsables del centro. Las llamas provocaron una densa humareda que alarmó también a los viandantes que en ese momento se encontraban en la zona de Cimadevilla. Los Bomberos del Ayuntamiento de Gijón tuvieron que permanecer en la zona durante más de una hora para ventilar por completo la sauna y asegurar la zona.

Se da la circunstancia que esta no era la primera vez que el Club de Regatas sufría un incendio en su sauna. En el año 2003 un socio que estaba leyendo el periódico provocó daños en las instalaciones que, de aquella, fueron menos costosos. Su reparación ascendió a 24.000 euros.

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