Casi 56 millones, en concreto 55.926.922,49 euros, es el montante de los catorce expedientes de modificación del presupuesto municipal que se consolidaron a lo largo del primer semestre de este año. Una cifra que supone un porcentaje del 29,46% sobre el crédito inicial con el que comenzó el año y que es de las más abultadas respecto a ejercicios anteriores en cuanto a ajustes sobre la previsión económica municipal. No hay que olvidar que el Ayuntamiento de Gijón vive en situación de prórroga presupuestaria una vez que la coincidencia del voto negativo de los tres partidos de la izquierda -PSOE, Xixón Sí Puede e IU- dieran al traste con el proyecto presupuestario de 215,9 millones presentado por la concejalía de Hacienda de Ana Braña. Tras este bloqueo, la alcaldesa Carmen Moriyón firmó el ocho de enero un decreto de prórroga de 189, 8 millones sobre los 213,5 de partida del presupuesto de 2015.
Así las cosas, las modificaciones presupuestarias han sido una constante en el mes a mes de la vida municipal de este año. Y lo seguirán siendo. Sólo hay que tener en cuenta, por ejemplo, que aquí no se incluyen los 689.149,60 euros de la modificación de créditos a la que dio luz verde el Pleno en su última sesión y que está en periodo de presentación de reclamaciones y sugerencias. Un plazo que acaba hoy.
Una sesión plenaria en la que no llegó a debatirse, aunque esa era la intención del equipo de gobierno de Foro Asturias, otro expediente de modificación del presupuesto por una cuantía de once millones de euros. Un dinero que la concejalía de Hacienda quiere dedicar desde ya al pago de deuda tras fijar una dotación de 28 millones para nuevas inversiones. Para hacer frente con mayor celeridad a las necesidades de la ciudad, el Ayuntamiento asumió en este primer semestre la contratación de dos nuevos préstamos: uno de 22 millones para inversiones y otro de nueve millones para gastos corrientes. Algo que ampliará la carga financiera a la que tenga que hacer frente el Ayuntamiento en el presupuesto del año que viene y que Foro entiende que hay que empezar a compensar desde este mismo momento jugando con las posibilidades que dan las diferentes vías de financiación abiertas.
Al margen de esos 55,9 millones en ajustes por créditos extraordinarios, suplementos de créditos, generación de créditos y transferencias de créditos están los 31.274.432,93 euros que como remanente de créditos de ejercicios anteriores se incorporaron a la cuenta municipal de 2016 en abril a través de una resolución de Alcaldía.
Con vista a dos años
En cualquier caso, la mayor urgencia que tiene ahora mismo entre manos el equipo económico del Ayuntamiento es presentar el plan económico-financiero a dos años impuesto por el incumplimiento de la regla de gasto en el ejercicio pasado. Ese incumplimiento, que trascendió el mes pasado al hacerse el cierre de las cuentas de 2015, exige fijar un nuevo diseño económico que debe contar con el visto bueno del Pleno y ser revisado por el Principado de Asturias, como entidad tutelante de las cuentas del ayuntamiento gijonés.
El cronograma que está sobre la mesa plantea que el equipo de gobierno presente esta misma semana el diseño de este plan a los grupos de la oposición en una comisión de Hacienda. Paso previo a ser incorporado al orden del día de la sesión plenaria de este mes. La ley de estabilidad presupuestaria impone que este plan garantice el cumplimiento de sus objetivos tanto en este ejercicio como en el ejercicio del año que viene. Ello afecta a negociaciones que Gijón tiene en marcha. En el caso de las cuentas de 2016 la concertación social con los sindicatos y la patronal y en el caso de los números de 2017 los presupuestos participativos.
