La movilidad en las ciudades está cambiando. Solo hace falta echar un ojo a las grandes urbes, como Madrid, o más pequeñas como Gijón, donde los coches han empezado a compartir calzada con vehículos de dos ruedas. Para aquellos que desconfíen de las bicicletas, ciertos consejos previos, como evitar las grandes avenidas o acostumbrarse a usar un timbre, nunca están de más.
Ese es el objetivo del ilustrador madrileño Juan García Alberdi, "Juanítez", de raíces gijonesas, que, animado por la buena acogida de sus viñetas sobre el gato Peráltez en "Twitter", se lanzó a la edición de "Manual de ciclismo urbano", una obra ilustrada sobre cómo sacar el máximo rendimiento al velocípedo y que el sábado presenta en el Palacio de Revillagigedo, dentro del Festival de Ciclismo Urbano "Ciclorama".
Juanítez ha sido testigo del cambio en la circulación de la calles de la capital. El viñetista, que colaboró desde 2011 con el blog "en bici por Madrid", achaca el gran incremento en el uso del vehículo de dos ruedas a la crisis de los últimos años. "Mantener un coche es muy caro y no todo el mundo se puede permitir el transporte público; la gente se plantea entonces otras alternativas", explica Alberdi. Una de las grandes contribuciones a la movilidad sostenible ha sido la bici pública, que el Ayuntamiento de Madrid puso hace dos años en servicio. En el centro de la capital y en el interior del anillo que forma la M-30 ya es habitual ver a gente pedaleando. " Cuando sales de la M-30, los conductores se vuelven irrespetuosos con los ciclistas", señala Juanítez.
El artista, que financió su obra por micromecenazgo a través de las aportaciones de la plataforma "Verkami", atribuye la masificación del uso de la bicicleta en los países nórdicos a una cuestión cultural. "En España debería usarse más que en Holanda. Aquí tenemos un clima privilegiado para andar por las calles", explica el madrileño, y añade "vivimos bajo el imperio de los automóviles. Desde que nacemos, nos acostumbramos a ver un coche como un signo de poder y de independencia".
A la pregunta de si recomienda el uso del casco, Alberdi responde que es decisión de cada uno. "Estoy en contra de su obligatoriedad. Los países que la implantaron redujeron en un treinta o cuarenta por ciento el uso del velocípedo", explica el autor para quien Gijón, ciudad que conoce perfectamente, es una localidad que invita al uso del la bicicleta dado que la mayoría de las calles son llanas. El ilustrador, hijo de gijonés y que no ha perdido verano en la ciudad desde los diez años, reconoce que "es una ciudad a la que da gusto venir". El futuro de los desplazamientos es algo impredecible, pero sí algo tiene claro Juanítez, que condena el uso del coche para desplazamientos cortos, es que "depende de la apuesta de las administraciones y de la conciencia de todos". Además de su actividad editorial, el madrileño forma parte de una consultoría de movilidad y transporte. A través de su trabajo ha conseguido que empresas como "Diverti Seguros" implanten el uso de la bici a todos sus trabajadores. Con sus viñetas pretende provocar un cambio de mentalidad y que los ciclistas no se sientan un "estorbo en la carretera".
