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ILDEFONSO RODRÍGUEZ | Secretario general del SIPLA (Sindicato Independiente de la Policía Local de Asturias) en Gijón

"La edad media de la Policía Local es de 49 años; desde 2010 no entra un funcionario"

"Debería haber oposiciones anuales de poca gente, no masivas; así garantizas una selección de los mejores aspirantes"

Ildefonso Rodríguez del Río. ÁNGEL GONZÁLEZ

Ildefonso Rodríguez del Río es, desde hace poco más de un año, el responsable de la agrupación gijonesa del Sindicato Independiente de la Policía Local de Asturias (SIPLA). Además de representar a sus compañeros -casi el 70 por lo ciento de los agentes de la ciudad son afiliados a su sindicato-, compagina su trabajo policial con el de abogado. Y lo hace gracias a una sentencia pionera que hace apenas unos días le dio la razón en el pleito que mantenía con el Ayuntamiento. El funcionario alegaba que no había incompatibilidad entre ambos trabajos y el juez le dio la razón.

-¿De verdad no es incompatible ejercer al tiempo la función de policía y la de abogado?

-Cada admnistración tiene su protocolo particular pero la Ley de Incompatibilidades marca claramente las limitaciones de cada empleado público a la hora de realizar una actividad privada. Ahí se dice qué tipo de profesiones con incompatibles y entre ellas no figura la abogacía. Es cierto que hay limitaciones legales pero no podemos aceptar que el pago del complemento específico en el sueldo sea incompatible con realizar otra profesión. Ese concepto no puede ser un cajón de sastre para cubrirlo todo. Para que te denieguen una incompatiblidad tienes que tener un complemento de dedicación exclusiva en la nómina, como sucede en la sanidad, y en la Policía Local no tenemos ese complemento.

-¿Cómo ha afectado la crisis a la Policía Local de Gijón?

-A nivel retributivo nos ha afectado como al resto de empleados públicos. Hemos sufrido congelaciones y reducciones en nuestro sueldo.

-¿Y en las plantillas? Una de sus reivindicaciones clásicas es la de contratar más personal para reducir la edad media de los agentes, ¿cómo está actualmente la situación?

-La situación es muy grave. La edad media a día de hoy de los agentes de la Policía Local de Gijón es de 49 años y el dato sigue subiendo. No entran funcionarios nuevos desde el 2010. Los nuevos, además, ya no acceden al cuerpo tan jóvenes como antes. Estamos muy escasos de plantilla. No cumplimos los parámetros que exige la Federación Española de Municipios. Deberíamos tener 1,2 agentes por cada mil habitantes y estamos por debajo del uno. La solución es sencilla, hay que contar con más trabajadores. Y lo decimos entendiendo que el Ayuntamiento tiene que regirse por el Real Decreto de Racionalización del Gasto Público, que sólo permite suplir jubilaciones, pero no es suficiente. El año que viene saldrán seis plazas para cubrir a los compañeros que se han retirado pero el Ayuntamiento tiene que hacer las reposiciones a año vencido y se van a cumulando las pérdidas de personal.

-Y eso con una Policía Local que tiene cada vez más competencias...

-Sí, y se nota. Cada vez hay más trabajo y no sólo por las competencias nuevas. La ciudad es un destino turístico que congrega a muchas personas en verano y eso lleva a más actividad y a más trabajo. Recientemente se creó, además, la unidad medio ambiental que sumó más tarea a los agentes.

-Estamos en verano. ¿Está cubierto el servicio?

-El verano es un problema porque es cuando más trabajo hay y lógicamente disponemos de menos efectivos por las vacaciones, pero los servicios se cubren. Si se hace mejor o peor eso ya no me corresponde a mí juzgarlo.

-¿Qué otras reivindicaciones tienen desde el SIPLA?

-Dada esa situación de la plantilla, cada vez menos y más mayores, deberíamos fijar una oposición anual de 15 plazas anuales. No queremos que haya convocatorias de gran afluencia porque eso provoca que el filtro no sea bueno. Si haces una convocatoria para escoger a diez personas sabes que van a entrar los diez mejores, pero si lo amplías mucho los agentes que accedan al cuerpo no van a ser tan buenos. Por eso queremos convocatorias anuales pequeñas. Pero aún tenemos más reivindicaciones. De hecho, a día de hoy nuestra mayor preocupación y aquello por lo que más peleamos es por la creación de una nueva Jefatura. Dentro del Ayuntamiento nuestras instalaciones son las peor consideradas. A principios de mandato ya nos reunimos con todos los grupos políticos para contarles las carencias que tenemos y las ilegalidades que se están cometiendo dentro de nuestras instalaciones. Tenemos el compromiso de todos los partidos y los sindicatos de que la nueva Jefatura va a convertirse en una prioridad. Y no sólo para ellos. También para el equipo de gobierno de Foro, que nos dijo que antes del final de la legislatura las nuevas instalaciones serían una realidad.

-¿No se cubren sus necesidades en la Jefatura?

-El edificio está catalogado y no podemos hacer nada. Por poner un ejemplo, cuando nos reunimos para el Plan de Movilidad vimos que ni tan siquiera podíamos colocar un aparcamiento de bicicletas dentro de nuestras instalaciones. No tenenos ni zona de seguridad alrededor de la Jefatura, todos los vehículos policiales duermen en la calle, en el garaje no hay extracción de humos, una persona minusválida no podría acceder a la Jefatura... En definitiva, no podemos prestar los servicios mínimos necesarios. Las taquillas no son suficientemente amplias y en nuestro vestuario tenemos dos duchas para 250 personas. Llevamos años abandonados. Hace unos meses hubo una tromba de agua y se nos vino abajo parte del techo en la sala de control y ahí hay mucho dinero invertido.

-¿Cree que ha mejorado la imagen de la Policía Local?

-Como tocamos al bolsillo es cierto que nuestra imagen no es la más adecuada de cara a la ciudadanía, pero eso es cuestión de mentalidad. A mí no me gusta el dulce pero suelo llevar caramelos cuando estoy trabajando para dárselos a los niños a los que los padres o los abuelos amenazan diciendo que el policía les va a llevar detenidos. Creo que nuestra imagen tiene que mejorar ante las próximas generaciones. Estamos para ayudar desde lo más mínimo hasta lo más importante.

-¿Cómo es la relación con el equipo de gobierno?

-Al principio no hubo muy buena sintonía a raíz de la polémica del cuestionario de la ordenaza de convivencia cívica en el que se preguntaba a los ciudadanos si les parecía bien que un agente pudiera dar órdenes. Nosotros no damos órdenes, simplemente hacemos que se cumpla lo que manda la autoridad. A partir de ahí las relaciones mejoraron. Hemos planteado cosas lógicas y se nos ha escuchado. Está por ver si se cumplen los acuerdos. A los Bomberos les acaban de dotar de un camión nuevo. Ellos pueden mejorar poque tienen buenas instalaciones; nosotros no tenemos ni lo básico.

-¿Están bien limitadas las competencias entre Policía Local, Policía Nacional y Guardia Civil?

-Yo creo que sí. Es cierto que podemos chocar con la Policía Nacional porque ambos tenemos competencias de seguridad ciudadana y con la Guardia Civil de Tráfico porque también nos dedicamos a lo mismo en las carreteras, pero dentro de las limitaciones podemos trabajar bien. Cuando salgo a trabajar y coincido con compañeros de otros cuerpos sólo puedo decir que la relación es buena.

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