El Real Grupo de Cultura Covadonga despidió ayer las primeras fiestas de su renovada directiva con la tradicional imposición de distinciones, a modo de homenaje, a los socios de mérito y honor del club, es decir, a aquellos que han demostrado lealtad a la institución durante 35 y 50 años respectivamente, que este año fueron un total de 82 personas. "Ustedes han hecho posible esta herencia perdurable de la que todos nos sentimos orgullosos", les dedicó el presidente Antonio Corripio, en especial a los diez socios de honor como son Klaus Dembinsky Puchert, Jesús Domínguez Miranda, Juan Fernández Lafuente, Luis González Martínez, Venancio Menéndez Marino, Jesús Rodríguez Gallinal, Ramón Rubiera García, Felipe Sánchez Zardain, Roberto Vega Costales y Joaquín Vega Rodríguez.

El barrio de Cimavilla, por su parte celebró una nueva jornada para todos los públicos dentro de su amplia oferta lúdica de sus fiestas. Por un lado divertimento para los más pequeños con una sesión de maquillaje artístico para niños con máscaras de lo más variopintas. En la parte religiosa, ayer tuvo lugar la procesión de la Virgen de los Remedios a la que varios devotos llevaron sobre sus hombros seguidos de una numerosa comitiva por las calles del barrio más marinero de la ciudad. Una zona que hoy prosigue su actividad festiva.