Lo intentaron una sevillana, un doctor, un loro peludo, una quisquilla, un buceador y varios sportinguistas dolidos con la derrota de ayer ante el Atlético de Madrid. Y sólo lo consiguieron tres. La cucaña de las fiestas de Los Remedios y la Soledad de Cimadevilla volvió a ser una pista escurridiza sobre la que apenas tres valientes alcanzaron a rozar la bandera colocada al final de un tronco de eucalipto embadurnado en vaselina. Fueron ellos los que se llevaron la gloria: Iván García, David Conde y Alejandro García.

No fue tarea fácil la de intentar deslizarse por el palo, con caídas en todas las versiones posibles: de espalda, de cabeza y hasta con doble tirabuzón, en un puerto deportivo lleno de público deseoso de disfrutar de una tarde de piruetas acuáticas. "Nunca había venido y vaya divertido que es, pero también muy difícil", comentaba Adelina González apostada en primera fila del respetable. Fueron un total de 19 los valientes que lo intentaron, todos chicos y a la caza de los trofeos que se ofrecían: un jamón, caña de lomo y queso. Fueron necesarias cuatro rondas, una clasificatoria y una final para imponerse a duras penas a la ley de la gravedad untada en vaselina.

Fue la cucaña la estrella de las fiestas del barrio alto en la jornada de ayer, a la espera de que hoy se celebre, a las 11.00 horas, la misa festiva en honor a la Virgen de la Soledad. Posteriormente tendrá lugar el desfile de los vecinos hasta el parque de Isabel la Católica, donde se realizará la tradicional ofrenda floral. Los vecinos se reunirán en el cerro de Santa Catalina para comer, y a las 20.00 horas saldrá la procesión de Nuestra Señora de la Soledad. La música cerrará el largo programa festivo de este año.

El barrio de Pescadores, en Jove, también festeja hoy el día grande de la Virgen de la Soledad, con misa solemne a las 12.00 horas oficiada por el párroco Juan Manuel Álvarez y procesión marinera. Además habrá comida de hermandad, entrega de una placa a la persona de más edad del barrio (Bernardo Couso), con baile y verbena para cerrar el día.

Los mayores fueron protagonistas ayer también en la comida anual de los vecinos de San Andrés de los Tacones, celebrada en el restaurante Savannah. Marino García Muñiz, de 81 años, y María Dolores Pérez Busto, de 79, se llevaron el reconocimiento de la parroquia.

Y en Moreda los vecinos se entregaron con entusiasmo a la tarea de hacer barrio con sus jornadas de convivencia. El deporte fue el tema del día, con ruta ciclista, campeonato de petanca y una carrera popular en el parque que contó con la presencia del concejal de Festejos, Jesús Martínez Salvador, como participante. Además hubo títeres y verbena, y hoy está previsto el día grande. Los vecinos que deseen asistir deberán acudir a las doce de mediodía al reparto de mesas y sillas para coger sitio. Después, se procederá al reparto del bollo y la botella de vino a los socios, y a las 14.00 horas dará comienzo la comida popular en el parque.

La tarde se dedicará a recordar la infancia y transmitir la tradición con zancos, lecheras, chapas y peonzas, así como un castillo hinchable para un disfrute más actual. La fiesta se acabará con romería musical.