La Junta de Gobierno pondrá en marcha esta mañana los trámites para cumplir la promesa que la alcaldesa Carmen Moriyón hizo a finales del mes pasado: cambiar las bases que regulan actualmente la concesión de las subvenciones a los barrios degradados para minimizar su impacto fiscal sobre los vecinos. Será el tercer cambio en la fórmula a seguir en una de las apuestas estelares de Foro en el gobierno.

La vía que ahora se abre plantea una alternativa mixta entre el sistema elegido en la calle Francisco Eiriz (Jove ) -los primeros del plan de barrios degradados- y el que se planteó en Inuesa (Tremañes) al poner en marcha la segunda operación. Esta tercera fórmula establece que el Ayuntamiento convoca el concurso de ideas para elegir el proyecto de rehabilitación a seguir, selecciona a la constructora en una contratación pública y controla la dirección de la obra. Eso sí, el contrato con la empresa lo deben firmar los vecinos.

Así se puede garantizar que la millonaria subvención que reciben al pagárseles íntegramente la obra pueda dividirse en cinco anualidades. Ese fracciona la presión fiscal que deberán soportar los vecinos ante Hacienda.

Hay que recordar que en Jove los vecinos se ocuparon de todo el proyecto mientras en la primera fase de Inuesa el control era del Ayuntamiento hasta el final. En el primer caso eran subvenciones dinerarias a dividir en cinco anualidades y en el segundo subvenciones en especie en los dos años de ejecución material de las obras. El nuevo sistema, que se estrenaría en las próximas fases de la obra de Inuesa si los vecinos así lo desean, permite volver a las cinco anualidades. Tras Inuesa deben llegar las obras en Portuarios, Contrueces, Monteana y Roces. Ellos sí con las bases nuevas desde el principio.

Del proyecto de Inuesa también se hablará en la Junta de hoy ya que desde el área de Contratación se plantea una modificación en las condiciones del contrato en vigor. La empresa reivindica un cobro de 120.000 euros por unas mejoras en la cimentación que tuvo que hacer para instalar los ascensores y que no se contabilizó inicialmente. Esta primera fase de la reforma de Inuesa afecta a cuatro bloques de la calle Marruecos y se adjudicó a Dragados por 2,6 millones.