La Policía Local de Gijón detuvo el pasado jueves a dos conductores por sendos delitos contra la seguridad vial, uno de ellos gijonés y otro ovetense. El primero fue arrestado después de que los agentes comprobasen, tras someterle a un test de alcoholemia, que quintuplicaba la tasa máxima permitida. El segundo, por su parte, conducía sin puntos en su carnet de conducir por faltas previas y contaba con una orden de ingreso en prisión por un delito de estafa.
La primera detención tuvo lugar en La Calzada, en la avenida de la Argentina, a un hombre de 32 años como autor de un presunto delito contra la seguridad vial. El detenido que en el momento de ser interceptado conducía un vehículo Smart, arrojó en la prueba del alcoholímetro una cifra cinco veces superior a la tasa máxima permitida por ley. En concreto, conducía con una tasa de alcohol en aire de 1,38 mg/l.
El segundo de los detenidos, de 30 años de edad y vecino de Oviedo, se escapó de un control rutinario en la calle de José García Bernardo y puso rumbo hacia la parroquia de Somió. Tras ser interceptado en la carretera de La Providencia y proceder los agentes a su identificación, observaron que tenía todos los puntos del carnet de conducir retirados y que sobre él pesaba una orden de ingreso en prisión por un delito de estafa. Por todo ello, se procedió a su detención y puesta a disposición judicial.
